Haz click aquí para copiar la URL

Yesterday

Comedia. Fantástico. Romance Un músico que lucha por abrirse camino se da cuenta de que es la única persona en el mundo capaz de recordar a los Beatles. (FILMAFFINITY)
Críticas 151
Críticas ordenadas por utilidad
escribe tu crítica
7
25 de octubre de 2019 2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una vez más, Richard Curtis demuestra que es único, un tesoro a proteger y la esperanza de la comedia romántica.
El hombre detrás de Cuatro bodas y un funeral, Notting Hill, Una cuestión de tiempo, El diario de Bridget Jone so por supuesto Love Actually (su debut en la dirección, además), tiene un don innato para construir buenas comedias románticas, con buenos personajes, un buen desarrollo, un final satisfactorio y las dosis justas de azúcar.
Esta vez dirige Danny Boyle (en una nueva vuelta de tuerca a una carrera en la que caben títulos como Sunshine, La playa, Trainspotting, Trance o Steve Jobs; gran versatilidad, la suya), pero el estilo de Curtis está plenamente presente en el guión que ha escrito para Yesterday, una simpática propuesta en la que, tras un extraño suceso, sólo un músico, Jack, recuerda las canciones de los Beatles y a sus cuatro miembros. Esta vez, sin embargo, le puede la ambición a Curtis y la cosa no sale redonda, básicamente por dos problemas: el exceso de metraje, que se nota sobre todo en los últimos 40 minutos, y en la escasa o nula explicación sobre por qué han ocurrido los acontecimientos que dan pie a toda la película.
Sin embargo, la música de los cuatro de Liverpool sigue sonando como los ángeles, la película es entretenida y muy agradable de ver, tiene momentos divertidos (atención a cuando Jack intenta tocar Let it be para sus familiares, las apariciones de Ed Sheeran o el talento cómico de Kate McKinnon) y sobre todo cuenta con una pareja protagonista maravillosa. Hamish Patel es natural como la vida misma, y además anta estupendamente y resulta muy fácil identificarse con su Jack. Lily James, por su parte, vuelve a demostrar que pocas actrices hay tan simpáticas, dulces y agradables que ella en la pantalla actualmente, y además su química con Patel es fabulosa.
En definitiva, una película notable, que desaprovecha ligeramente su excepcional punto de partida, pero que sirve no sólo como entretenimiento y como homenaje a una banda única en la historia de la música, sino también como ejemplo de una buena comedia romántica.

Lo mejor: Himesh Patel y Lily James, encantadores y perfectos para sus personajes, y el don de Richard Curtis para escribir historias emotivas, entretenidas y llenas de encanto. Con los Beatles todo es más fácil.
Lo peor: No hay explicación sobre por qué ocurre lo que ocurre, y los últimos 40 minutos podría y deberían haberse reducido.
3
19 de enero de 2020 2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
A pesar de una buena premisa inicial, la película resulta tediosa y predecible. Imaginaos qué decepción, que ni siquiera las icónicas canciones de Los Beatles brillan en la pantalla.

La historia de amor es de las peores y menos creíbles que se ha visto en la gran pantalla desde hace tiempo, la química entre los personajes es nula. Ni siquiera parecen interesados el uno en el otro en ningún momento.

Poquísimas cosas positivas que reseñar en este film...
4
15 de marzo de 2020 2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
56/11(13/03/20) Decepcionante y muy fallida comedia romántica que parte de una premisa prometedora (que no original, pues los argentinos mariano Cohn y Gastón Duprat especularon con un tema similar en su film “Querida voy a comprar cigarrillos y vuelvo” de 2011, con su protagonista viajando al pasado y plagiando un año antes ‘Imagine’ de John Lennon), pero que en cuanto debe desarrollarla cae en lo simplón, sin hincar el diente al mucho potencial tenía que de pronto Los Beatles desaparezcan de la historia (por qué da igual, como en otra película curtisiana, “Una cuestión de tiempo”, donde una máquina del tiempo es un armario, ello por imperativo del guión) como si no hubieran existido, pero un músico intrascendente inglés recuerda todos los temas del grupo de Liverpool, pues en vez de analizar el sin fin de elementos que da esto, como el público de más de medio siglo después como puede reaccionar a las canciones de los Fab Four, todo lo reducen a un romance anodino y aburrido, donde sus personalidades resultan nulas en interés (más planos que una mesa), la Montaña pariendo un Ratón, con una historia en la que no se aborda la fama, la fagocitadora industria musical, el proceso creativo (el origen de las canciones), sobre la importancia del carisma (no solo eran los temas del cuarteto, era su personalidad marcada), no hay análisis sobre lo que fueron Los Beatles. De este canto de amor al cuarteto ‘liverpoolense’ me atrajo la dirección de Danny Boyle, un tipo transgresor, con coraje, dinámico, políticamente incorrecto, que me maravilló en “Trainspotting”, “28 días después”, “Slumdog Millionaire” y “127 horas”, y que siempre, incluso en sus peores obras deja destellos de su nervio y sentido estético singular, pero desgraciadamente aquí parece trabajar con desgana, sin querer arriesgar lo más mínimo, lo siento absorbido por lo peor del meloso guionista Richard Curtis (“Cuatro bodas y un funeral”, “Notting Hill”, o “Love actually”), que se basa en una historia propia y de Jack Barth (“Attack the block”). Film que cae en lo convencional, lo ordinario, con chistes poco graciosos, con actuaciones rutinarias, hasta desembocar en un rush final que roza la vergüenza ajena en lo cursi. Film que con el anzuelo de la nostalgia por Los Beatles atrae, pero que con el devenir del argumento hace aguas por todos lados cual barco protagonista de “La Tormenta Perfecta”. Una ñoñería vacía de contenido, tediosa, artificiosa, con secundarios caricaturescos (el amigo Rocky es un típico cliché atolondrado varias veces visto en los guiones de Curtis pegado al protagonista; la caricaturesca manager musical; Ed Sheeran parodiándose a sí mismo todo el tiempo reverenciando al protagonista hasta provocar subida de azúcar (Sheeran murmura: "Siempre me dijeron que alguien vendría y sería mejor que yo. Tú eres Mozart y yo soy Salieri");, con una historia de amor tan pretensiosa como previsible, donde nos e sabe el porqué de esa tensión amorosa entre ellos no resuelta.

El título por supuesto proviene de la canción del mismo nombre escrita por John Lennon y Paul McCartney. Los cineastas pagaron $ 10 millones por los derechos de usar la música de los Beatles; aunque ninguno de los miembros estuvo involucrado, Boyle recibió aprobación del proyecto por parte de ellos y sus familias. Fue un gran éxito comercial, recaudando $ 151 millones en todo el mundo contra un presupuesto de producción de $ 26 millones. El papel secundario de Ed Sheeran fue originalmente destinado a Chris Martin, quien lo rechazó. Para el papel principal, Patel fue seleccionado entre los muchos actores que audicionaron, con Boyle convencido de que Patel era la elección correcta después de escucharlo interpretar "Yesterday" y "Back in the URSS" durante las audiciones. Boyle sintió la voz de Patel tenía alma; Sheeran estuvo de acuerdo. Además de actuar, las canciones de los Beatles en la película son cantadas por Patel, también toca la guitarra y el piano. Ana De Armas tuvo un papel en la película, interpreto un interés amoroso de Jack, pero su aparición se eliminó cuando el público de prueba sintió a Jack se lo hacía menos comprensivo.

Dentro de la nadería en la que la película tiene en el tramo inicial sus alicientes para esperar una senda muy mejor, como cuando Jack se sienta al piano en casa de sus padres a tocar ‘Let it be’, cuando ya sabe que en este mundo paralelo no han existido Los Beatles. Intenta hacer sonar la melodía a modo de regalo a sus progenitores, pero es interrumpido una y otra vez, lo que exaspera a Jack, espetando a sus padres: "Es como si Da Vinci estuviera pintando la Mona Lisa frente a tus ojos ensangrentados!".

La película cae en simplismos infantiles, pues da por hecho que las canciones del mítico grupo serian hoy día aclamadas ipso facto, no entra en que la sociedad de los 60 no es la de hoy en la era de las redes sociales, da por descontado que hoy serian consideradas sus canciones Grandiosas de modo aséptico, sin hacer relacionar que parte de la popularidad de estos tremas proviene de que las cantaron ellos, pues no es igual que ‘My way’ la cante un Don Nadie a que la interprete Frank Sinatra. No se indaga en lo que la falta de Los Beatles hubiera supuesto, como su influencia de no haber existido habría supuesto la caída de muchas fichas de dominó artístico. Cayendo en una historia sin gracia sobre como un artista por azar consigue un estrellato exprés, pero esto no es más que un McGuffin ‘curtisiano’ para colarnos un romance soso, donde no hay intensidad alguna, donde no hay química entre la pareja, donde te da igual (por lo menos a mí) lo que les pase. Donde el cebo de las canciones beatles no puede tapar tanta escasez de inteligencia.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
La cinta parece tendrá una subtrama de interés cuando se comentan otras desapariciones de la cultura popular como los cigarros, la Coca Cola o Harry Potter, pero esto se queda en un mero running-gag sin fuste alguno. O también parece habrá un ramal que surcará por los mecanismos de que dio lugar a este mundo paralelo, ello cuando aparece la pareja de mediana edad que también sabe quién son Los Beatles, pero tras presentarse desaparecen sin más. También hay una aparición de un personaje mítico que en cierto modo tiene efluvios a “Erase una vez en Hollywood”, sobre realidades paralelas donde gente asesinada ahora vive, pero esta aparición es como toda la película, impacta de arranque pero su desarrollo resulta penoso.

La crítica a la industria musical resulta ridícula, con gags propios de mentes más simples que el mecanismo de un martillo. Ello con chistes tan ingeniosos (ataque de cinismo) como que rechacen los ejecutivos de la discográfica el título del álbum ‘Sgt. Pepper's Lonely Hearts’ Club Band porque es demasiado largo, y dicen que llamar a un álbum ‘The White Album’ tiene "serios problemas de diversidad". O ejemplificando esta maquinaria musical en la fachosa manager, al que se expone de forma acartonada en su pragmatismo.

Hay escenas filmadas en todo Suffolk en Cantley, Halesworth, Dunwich, Shingle Street, Latitude Festival y Clacton-on-Sea, Essex. Se emitió una llamada de casting para extras en escenas nocturnas tomadas inmediatamente después de los cuatro conciertos consecutivos de Sheeran en el Principality Stadium en Cardiff, Gales. Otros 5.000 extras adicionales aparecieron en escenas en Gorleston-on-Sea en Norfolk. El estadio de Wembley también se usó para filmar una escena de concierto. La filmación también tuvo lugar en Liverpool, haciendo uso de PennyLane, el aeropuerto John Lennon de Liverpool, la estación Lime Street y el túnel Queensway.

Spoiler:

Porque en la insulsa escena del encuentro de Jack con John Lennon, el primero no le pregunta al segundo si le interesa la música?
Porque resulta tan insulsa la relación entre Ellie y Jack? Porque en 20 años ella no le dice que está enamorada d eél?
Porque él en 20 años no se ha dado cuenta de que ella está enamorada de él?
Porque resulta tan previsible que acabaran juntos?
Porque ese clímax de Jack confesando que sus canciones son escritas por Los Beeatles me resulta tan vergonzoso? Jack suelta que él no las ha escrito, que ha sido este grupo. Pero este grupo no existe, no lo tomarían por loco?
Qué sentido épico tiene que cuelgue las canciones gratis en internet en la era de la piratería?
Porque no quiere ser millonario si no ha hecho daño a nadie, tiene un Don y lo lógico es aprovecharse de él. Pues esta confesión me resulta de un buenismo que me produce dentera.

Me queda una película donde solo merece la pena por oír las canciones de Los Beatles, pero torpedeado por el resto, que es infumable. Fuerza y honor!!!
1
8 de diciembre de 2020 2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Nadie ama las canciones de The Beatles más que yo, ni les tiene más respeto reverencial. A mí no me cabe duda de que estamos ante el grupo más importante de la historia de la música por los siglos de los siglos. Pero Danny Boyle no lo respeta cuando perpetra, más que rueda, una cinta infame e impresentable titulada “Yesterday”, que nunca debió existir a pesar de que revolotea a lo largo de todo su metraje alrededor de la discografía de los de Liverpool.

La premisa argumental es una estupidez. El desarrollo está telegrafiado ab initio a través de la fórmula palomitera repugnante al uso. El final es ridículo y da risa de lo estúpido que resulta su happy end mascado y digerido, infame. Su comedia romántica no funciona nunca, ni como comedia ni como romanticismo. Todo es un pastiche de diez mil películas ya mil veces vistas y produce vergüenza ajena en general e ira destructiva en los que idolatramos a The Beatles, que no son respetados en este esperpento cinematográfico.

Tan solo el planteamiento inicial argumental ya es increíble, resulta finalmente inexplicado en la propia cinta y no deja de ser ridículo: a raíz de un apagón planetario durante 12 segundos sin electricidad en todo el globo terráqueo, es como si The Beatles nunca hubieran existido (de paso la CocaCola y Harry Potter tampoco) y nadie conoce sus canciones. Es imposible un mundo sin The Beatles (en eso le tengo que dar toda la razón al infame guionista Richard Curtis, un auténtico terrorista con la comedia romántica como arma de destrucción masiva) y hay un joven músico fracasado que resulta ser el único que conoce sus canciones. Obviamente, va a utilizar la oportunidad para hacerse pasar por el compositor de las mismas y saltar a la fama a nivel mundial.

Con semejante premisa, lo demás se veía venir lamentable. Pero te quedas corto en las previsiones, es aún peor de lo que esperas. El Danny Boyle que alguna vez nos deslumbró (o quizás no tanto si te paras a pensarlo) ya no existe, está enterrado por las ansias de taquilla, dejó de respirar como artista, es apenas la ruina de lo que alguna vez pudo ser.

“Yesterday” es una película mala de solemnidad que los que amamos a The Beatles no podemos perdonar. Nos hemos quedado con tu cara, Boyle.
6
10 de julio de 2019 1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
A partir de una disparatada premisa de Jack Barth, Richard Curtis lleva a cabo un guion de equilibrios difíciles y muy vinculado al tono y mezcla de géneros que redondeó en Cuestión de tiempo o Notting Hill (sin olvidar otras piezas icónicas, pero no tan análogas, como Cuatro bodas y un funeral o Love actually).

Curtis tiende la trama sobre un puente fundamentado en un “y si…” muy audaz y al que conduce hasta muy lejos. Esto siempre supone riesgos que afectan a la verosimilitud y a la organicidad de la historia.

Por eso, en Yesterday, algunos espectadores no entrarán o saldrán pronto del universo creado por el autor y Danny Boyle. No obstante, sigue existiendo un público a la caza de esas (ahora muy escasas) comedias románticas de tintes clásicos (sin pretensiones de subvertir muchos clichés), aunque bien actualizadas.

A todo esto contribuye la dirección, siempre estéticamente ruidosa y explicitada, de Boyle (Slumdog Millionaire, Steve Jobs, 127 horas, Millions, 28 días después), que imprime el ritmo y la sensación escénica necesaria para poner el acento en las emociones y reflexiones consecuentes. En este sentido, la película deja espacio para que los personajes se aproximen al espectador, gracias también a unos actores que manejan bien esa cercanía y el hacer suyos los roles, aunque los límites sean bastante convencionales.

Sin duda, y a pesar de esa citada convencionalidad, el guionista rema a contracorriente del éxito individualista (a coste de descuidar otras facetas esenciales) que reina en occidente y en unos cuantos de sus nuevos mitos de ficción.

Por eso, y sabiendo las etiquetas de fácil idealismo que le pondrían, es loable, sano y muy realista que Curtis incluya, en un argumento sobre los logros artísticos, la plenitud que otorga el batallar por la integridad moral y los logros más personales y relacionales.

www.contraste.info
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow
    Bienvenido al nuevo buscador de FA: permite buscar incluso con errores ortográficos
    hacer búsquedas múltiples (Ej: De Niro Pacino) y búsquedas coloquiales (Ej: Spiderman de Tom Holland)
    Se muestran resultados para
    Sin resultados para