Aunque como proceso lógico cada vez existen más series orientadas a un público femenino, cuando en 2004 surgió "Mujeres desesperadas", solamente venía a la mente el precedente de "Sexo en New York". Si el cine español ha encontrado en Almodóvar al traductor perfecto de ellas con el séptimo arte, para los Estados Unidos, el formato televisivo es el caldo de cultivo perfecto para crear una atmósfera femenina y muy curiosa en un territorio ficticio pero cotidiano.

Si bien no es mi tipo de serie, debe admitírsele originalidad y un perfecto casting, donde podrían destacarse de forma sobresaliente a Marcia Cross y Teri Hatcher. De Melrose Place y novias de Superman a componer dos personajes con aristas muy interesantes, aunque es probable que el show perdiese cuando abandonó la cotidianeidad con algún cadáver en el armario, para ser una sucesión de misteriosos asesinatos con un poquito de día a día.

La serie, que se fue con un gran éxito en audiencia, supuso también el salto a la fama de Eva Longoria, quien hizo algunos de los cortes de césped más sexies de la historia de la pequeña pantalla.

Las chicas son guerreras y televisivas en este devenir, donde quizás podríamos poner el asterisco de que los guiones rizan demasiado la madeja durante las últimas temporadas...

Con todo, curiosa y entretenida, que no es poco en los tiempos que corren.

Después de resistirme durante años (sólo el título espanta un poco) y de escuchar tantas alabanzas tanto al guión como al reparto, finalmente me pongo a ver esta serie y descubro que definitivamente lo entretenido casi nunca significa bueno. Mujeres Desesperadas es un intento de mostrar la realidad de las mujeres (madres, hijas, esposas, amantes y demás) que se queda en eso, en un intento a mi modo de ver edulcorado, poco realista en general y directamente vergonzante en ocasiones.
A excepción de Teri Hatcher y sus muecas infinitas, el reparto se salva por los pelos y la trama roza el culebrón absurdo. Al igual que Anatomía de Grey y demás series parecidas, no se puede esperar de ésta que nos deslumbre o nos muestre nada nuevo. Eso sí, mientras te tomas un café entretiene, por lo menos hasta que alguno de los diálogos entre las protagonistas hace que se te atragante el café.

Si en American Beauty se retrataba formidablemente el sinsabor y el fracaso del "American Way Of Life", donde cada personaje veía todos sus sueños rotos por la cruda realidad.

Aquí tenemos "Mujeres Desesperadas": una versión deplorable de lo anteriormente expuesto. Un conjunto de mujeres que viven el "sueño americano" siendo unas absolutas marionetas de su propia mentira.

La serie es una mezcla de "Sexo en Nueva York", "American Beauty" y "Las Mujeres Perfectas". Carece de una línea argumentativa sólida y de personalidad propia. Su existo radicó una vez más en explotar el machismo subyacente en la mentalidad mundial: por muy guapa, inteligente y desenvuelta que sea una mujer, al final siempre es una zorra.

No es que afirme yo esto, es el propio mensaje de la serie y que al igual que "50 Sombras de Gray". Alimenta un oscuro estereotipo que al final acaba calando hondo incluso entre las propias féminas, (el principal target de la serie)

¿Es esta la serie más sobrevalorada de la historia? Es una de las más firmes candidatas.
Lamentable guión, lamentables actrices (no todas), trama paupérrima...
La serie trata de un grupo de mujeres pijas que viven en un vecindario irreal,donde parece que se ha producido un crimen y la gente guarda secretos... diálogos sonrojantes de verdad, personajes con los que nadie se puede identificar, es patética.

La había votado con un tres, pero acabo de ver un capítulo y he venido inmediatamente a solventar mi imperdonable error. He visto muchas películas de serie B, he visto cosas horribles, he visto cosas que muchos de vosotros no podriaís soportar (Los surfistas nazis deben morir y cosas asi), pero rara vez he visto algo tan sobrevalorado como esto. Las peores actrices de la historia sumado a los que quizás sean los más predecibles guiones y más repetitivos, así como absurdos y poco creibles. ¡Y a la gente le gusta! Hay que ser realmente muy feminista y esnifar muchisimo pegamento para soportar disfrutar con esto.