Vi un trailer, leí el resumen del guión y me pareció divertida la idea; así que la busqué y efectivamente es bastante divertida con un par de giros inesperados, pero no va más allá de eso.

El caso es que plantea bastante bien el dilema de si ser uno mismo o fingir al comenzar una relación; pero apenas desarrolla el asunto de una manera seria y solo sirve para crear algunas situaciones divertidas y una fricción entre los protagonista. El resto es un canto a la desaliñada Annie Hall milenial, que como aquella fiera de su niña, intuye todo correctamente a pesar de sus meteduras de pata.

Yo no soy muy partidario de este tipo de insensatos personajes femeninos, pero Alexandra Daddario tiene una buena vis cómica y construye bien el personaje. El problema es que es Tyler Hoechlin no le da la réplica en ningún momento. De acuerdo que este tipo de protagonistas femeninas eclipsan al protagonista masculino, pero en la fiera de mi niña, el personaje que compone Cary Grant da el contrapaso perfecto en cada caso: desde el circunspecto al atónito, pasando por el enojado y terminando en el ilusionado; sin embargo, Tyler Hoechlin es inexpresivo más allá de su sonrisa, y no sabemos si compone un personaje tímido, misterioso, preocupado, condescendiente o estúpido simplemente.

El resto del elenco cumple sin destacar y la dirección tiene el mérito de no hacerse notar ni para bien, ni para mal.

Acabo de ver la película simplemente porque la estaban emitiendo en la TV de mi proveedor de internet, y el caso es que me ha dejado una doble impresión de gusto y de disgusto.

De gusto porque me parece una película mucho más fidedigna de lo que suelen ser las películas de adolescentes, que refleja bastate bien la realidad en cuanto al ambiente, comportamientos, diálogos, etcétera. Lo cual creo que es mérito de los guionistas, del director y de la pareja protagonista (dos buenos actores en mi opinión).

Y de disgusto porque esta película trata tantos asuntos entremezclados que termina siendo un "espectacular batiburrillo".

El primer asunto que voy a citar se refiere a la estrategia vital "carpe diem" que consiste en vivir y disfrutar el aquí y ahora de cada instante. Lo cito el primero porque es el asunto al que se alude en el título en español y porque es el más constante durante la película: se refleja en las declaraciones y la absoluta irresponsabilidad de un personaje secundario y en la propia actitud del protagonista (aunque en el caso del protagonista, más que una estrategia voluntaria y consciente de vivir el presente parece ser una absoluta falta de relfexión). Tanto la estrategia consciente de vivir el presente como la de ni siquiera reflexionar sobre tener una estrategia vital son temas estupendos; pero en lugar de quedar reforzados, explicados, etcétera, por el resto de los asuntos que trata la película, quedan completamente desdibujados por la mezcolanza.

Otro asunto es al que alude el título original en inglés "The spectacular now"; que aunque parece que se refiere al mismo asunto de vivir el presente como estrategia vital; en mi opinión se refiere a esos momentos de éxtasis y comunión con todo lo que nos rodea que a veces tenemos las personas normales (sobre todo en la juventud), y que algunos santos, budas, etcétera, dicen tener todos los días y a todas horas (si digo que no es el mismo asunto es porque hay muchas personas que tienen como estrategia vital vivir el presente pero que nunca han sentido esos momentos de éxtasis y viceversa). Pues bien, este nirvana solo le sucede al protagonista en un momento concreto de la película (no diré en que momento para mantener el suspense) y no me parece que justifique el título original de la película, ni tampoco la personalidad del protagonista o viceversa (quizás en la novela este asunto del éxtasis tiene tanto tratamiento como para darle título, y quizás se enlaza mejor con la estrategia de vivir el presente, pero, en mi opinión, esta es una de las escasas veces en que el título en español refleja la película mejor que el original).

Otro asunto es la ya típica relación entre el chico popular y superficial con la chica tímida y profunda. Otro tema muy interesante, desde luego, pero que tampoco se trata lo suficiente para suponer una óptica distinta de tantas y tantas películas sobre el tema. Solo diré que la relación me resultó más creíble por el buen hacer de la pareja protagonista y por la naturalidad de los diálogos que por lo que nos cuenta la película. Es decir, que la relación no resulta muy convincente y en lugar de reforzar el asunto de la superficialidad irreflexiva del protagonista, lo desdibuja.

Otro asunto que se plantea es el del "incomprendido", o sea, la diferencia entre el juicio popular y lo que realmente es una persona. Muy importante también como asunto, pero que tampoco se desarrolla lo suficiente.

Otro más es el asunto del alcoholismo adolescente e incluso infantil, que tampoco se trata más allá de mostrar que beben con bastante frecuencia, un par de incidentes y un par de referencias.

Podría seguir citando asuntos que se entrecruzan en el complejo argumento como el paso de la adolescencia a la madurez, la poderosa influencia de la genética y/o de los recuerdos infantiles en la personalidad, etcétera, etecéra, pero no tengo tiempo para enumerarlos todos; y es que me dio la sensación de que que quisieron enumerar en sola película todo lo que le puede ocurrir a unos adolescentes (quizás temían que nadie les fuera a producir otra). Y no niego que a un protagonista con ese nivel de irreflexión le pueda ocurrir todo eso a la vez, incluso puede ser muy probable que le ocurra todo eso a alguien tan irreflexivo. La cuestión es que mi limitada humanidad necesita varias películas completas para asimilar de una manera efectiva todo lo que plantea la película.

Resumiendo, que como película está bien dirigida y actuada y da mucha más impresión de realidad que la mayor parte de películas sobre adolescentes; pero la película es demasiado ambiciosa y ya se sabe: "el que mucho abarca, poco aprieta".

Por si alguien quiere saberlo, esta película ilustra la recomendación más revolucionaria del evangelio atribuido a Jesús de Nazaret. Ese que dice que no tenemos que preocuparnos por la comida, la ropa, la vivienda, ni por nada en realidad, porque todo aquello que verdaderamente necesitemos no será dado siempre que... no nos preocupemos.

Además, la película cuenta con unos magníficos actores y un divertido guión, que no, por ser divertido, deja de ser transcendente en todo momento. Así que recomiendo que se diviertan viendo esta excelente producción con total despreocupación, y disfruten de la vida en general intentando construir su particular capilla (o anticapilla) sin preocuparse de si tienen o no tienen recursos para construirla (o destruirla).

PD. Es cierto que salen unas monjas, un albañil baptista y hasta algún cura despistado, pero igual podrían haber sido una tribu hippie y un nerd tecniloco que se proponen hacer cultivos hidropónicos de marihuana en el Sahara, lo que importa son las situaciones, los diálogos, y, sobre todo: que no te preocupes tantooooooo!!!

Si la polémica palabras versus imágenes fuera solo un McGuffin que luego se olvida, esta película sería pasable gracias a los dos protagonistas, que son bastante más creíbles que su polémica, y porque llegan al amor a base de darse caña mutuamente sin falsos paripes románticos. Pero lo malo es que la tonta polémica ocupa buena parte de la película para concluir en una síntesis final rellena de citas pedantes y digna de Barrio Sesamo: "separaaaados estaaaaan bieeeeen peroooo juntoooooos muchoooooo mejooooor".

Está claro que Lily Tomlin es un espectáculo en si misma, pero la película me parece totalmente convencional y no me aportó nada nada más que que acostumbrar mi oído al inglés porque la he visto con subtítulos (si no fuera por eso, ni termino de verla).

El caso es que todo el planteamiento, nudo y desenlace lo hemos visto ya montones de veces, y comento el argumento en el spoiler por si acaso hay personas que les parece original. El caso es que es tan convencional, que a mi me da la impresión de que los guionistas crearon una abuela lesbiana para que la película tuviera algo original, pero, afortunadamente, hace tiempo que una abuela lesbiana dejó de ser algo original en las películas.

Por lo demás, los diálogos son hasta creíbles, tiene alguna broma buena, y alguna frase que quizás sea original, pero para mi es una película totalmente prescindible más allá de Lily Tomlin en si misma, así que le pongo un pasable porque conseguí pasarla hasta el final.