Catalogada como una de las diez mejores películas en la historia del cine, fue realizada por el genio de Orson Welles a la edad de 26 años. RKO, la productora lo contrató después de su legendaro e impactante programa radial que hizo sobre la Guerra de los Mundos, que provocó una histeria colectiva. La compañia productora le dió contrato de exclusividad y le ofreció entera libertad para que se encargara de todo el proceso de producción de la cinta. Orson Welles fue el primer cineasta en Estados Unidos que logró tal hazaña: fue productor, director, guionista, actor, promotor de su film y contrato a su equipo de actores del Mercury Theatre. La película fue una innovación en todos los planos: técnico, estético y sociológico. El Ciudadano Kane aborda la vida de un hombre poderoso,magnate del periodismo, Charles Foster Kane, que antes de morir, pronuncia la palabra "Rosebud". Un periodista es el encargado de averiguar el significado y va en busca de la verdad, conversando con diferentes personas que lo conocieron y que van reconstruyendo en flash-backs su vida: empleados, amigos, esposa y amante, pero nunca logra dar con el misterio de la palabra. Al final, Xanadu, la mansión del millonario en mudanza, un pequeño trineo es arrojado al fuego, con la palabra "Rosebud" escrita en su parte posterior. Foster Kane pronunció esa palabra, porque al morir recordó, su feliz etapa infantil cuando jugaba en la nieve cerca de su humilde casa. La cinta muestra simbólicamente, el ascenso-descenso de un hombre que existió: Wllliam Randolph Hearts, un magnate verdadero del periodismo y de los Mass Media, que censuró de modo implacable la cinta. Orson Welles hace un retrato de un codicioso, soberbio y ambicioso self-made man norteamericano que llega a la cúspide del poder económico y politico. Welles, pese a sus impulsos manipuladores y autócratas, lo humaniza, lo vuelve vulnerable, ante la muerte. Es una alegoría de los mecanismos del poder del sistema capitalista, es una crítica del modo de vida americano. Todo conjugado y sintetizado: es un fresco histórico de los Estados Unidos del primer medio siglo XX. Su importancia fue fundamental para el progreso creativo, artístico y político del cine norteamericano y mundial.

La historia del último emperador chino, quien asume el poder cuando es un niño de tres años y es adorado como un dios por su pueblo. Conforme va creciendo va perdiendo su imperio, es recluido dentro de la ciudad amurrallada,abdica y es fiel colaborador de la ocupación japonesa, con la llegada de Revolución Cultural es reeducado para quitar su ideología aristócrata. Finalmente, adulto es un feliz jardinero, testigo del culto a la Revolución Cultural y a Mao. Al ser contratado en Hollywood, como realizador, Bertolucci cierra y comienza una etapa como artista y cineasta. Su pasado marxista lo aplica para contarnos la grandeza y la miseria de un emperador, narra una triste y bella y dramática historia desde el poder, en el poder y bajo el poder político. Como siempre emplea de modo estético y dramático la totalidad concreta, la intimidad psicólogica, su amor por la ópera de Verdi, para estructurar el origen, desarrollo y conclusión de la China del siglo XX, de modo símbolico, alegórico y estético. En el film hace gala de todos sus recursos estéticos y su conocimiento de la revolución permanente, para elaborar un grandioso fresco histórico íntimo y espectacular. El film obtuvo nueve oscares de la academia, entre ellos como mejor director y película.

El gran realizador norteamericano John Huston es quizá el mejor cineasta que adaptó cinematográficamente grandes obras y novelas literarias al celuloide. El halcón maltés, El tesoro de la sierra madre, reflejos en un ojo dorado, son ejemplos y lecciones de cine y guionismo, de cómo recrear la literatura en el séptimo arte. Huston es un cineasta dotado de una envidiable técnica cinematográfica basada en el carácter de sus personajes que se vuelven arquetipos, héroes anónimos o antihéroes que luchan contra sus propios demonios para vencerlos de modo implacable y épico. Su estilo está basado en una narración tradicional pero inyectándole valores míticos, legendarios, donde la grandeza humana nace de la autenticidad y el valor de enfrentarse a una realidad apabullante, no exenta de odios, rencores y fracasos. Su cine es poderoso en fuerza dramática y emocional. Es uno de los grandes directores en la recreación de atmósferas tormentosas, densas y profundas y en el ritmo narrativo, virtuoso y dinámico, Basada en la clásica novela de Hermann Melville, y en colaboración, con un extraordinario y sublime guión, del gran escritor de ciencia ficcion Ray Bradbury, la cinta es simbólica: la lucha del hombre contra la naturaleza, contra sí mismo. Grandiosa por el heroísmo y el tesón de un hombre por rescatar su orgullo, no exento de soberbia y resentimiento y con una maravillosa banda sonora, narra la obsesión, odio y locura de un capitán de barco llamado Ahab por un gran cetáceo blanco, Moby Dick, quien le arrancó una pierna en el pasado, y de la cual quiere vengarse a todo costa. En este loco afán de encontrar, destruir y matar al monstruo, no descansará y lo llevará al sacrificio inútil de sí mismo, de su tripulación y de su barco.

A principios de la década de 1970, Estados Unidos de Norteamérica intervenía de modo directo y total con los gobiernos militares de Sudamérica. La CIA era la encargada de desestabilizar a gobiernos civiles, de apoyar a las organizaciones de derecha y manipular con su ideología proimperialista a paises y sociedades latinoamericanas. Costa Gavras es un realizador franco-griego que se especializó en un cine militante de izquierda radical, comprometido con los movimientos sociales populares, los derechos humanos(que en ese entonces pasaban desapercibidos), que estaba en contra de los crímenes de guerra, las desapariciones y la tortura. Gavras había obtenido La Palma de Oro en el festival de Cannes por su gran film "Z". Dos años después dirige "Estado de Sitio", insólita y audaz crónica-denuncia antiimperialista norteamericana sobre el caso de Philip Michael Santore, alto funcionario de la CIA, encargado del entrenamiento de fuerzas policiales extranjeras.Este es secuestrado por la guerrilla urbana uruguaya, denominada "Los Tupamaros", quienes condicionan su libertad a cambio de la liberación de 150 guerrilleros encarcelados. Todo esto provoca una crisis política interna de consecuencias inimaginables. Por primera vez en la historia del cine político mundial-en este intenso y emocionante thriller político, dirigido con maestría y virtuosismo por Gavras- se aborda sin maniqueísmos, sin villanos, sin engaños, al lado opositor-el movimiento guerrillero tupamaro- sus demandas, sus exigencias, su modus operandi, finalmente ellos fueron las principales víctimas de un represor gobierno ultraderechista uruguayo, coludido con las agencias de espionaje norteamericanas.

A mediados de la década de 1970, El Estado, por medio de la compañía productora Conacine produjo cintas con temáticas de índole, político, social y sexual. Era el sexenio de la apertura democratica echeverrista donde surgió una nueva y talentosa generación de cineastas: Arturo Ripstein, Felipe Cazals, Jaime Humberto Hermosillo, Juan Manuel Torres y Francisco del Villar. Este último se especializó en el género erotico con serias preocupaciones sociales y políticas. Esta interesante película es quizá la que mejor refleja la confusión sexual y generacional de los setenta, aunada a la decadencia de la clase alta. Carlos es un cínico y arrogante arquitecto que decide irse a Acapulco con su amante Diana, para festejar el cumpleaños de su mejor amigo Hector y con la hermana de éste, Isabel. Esta reunión, que dura 24 horas, donde participa el sirviente del grupo, se convierte en una serie de conflictos psicológicos y de incesto, amorales, encuentros sexuales y violentos donde entran en juego, los desnudos, las orgías, que finalmente terminan en un aborto, un asesinato, una violación. Del Villar expone una alegoría del poder corrompido, un síntoma del deterioro de las relaciones amorosas, los instintos perversos de la clase millonaria y realiza una critica del caos y la hipocresía en que se encuentra la élite aristócrata. El estupendo realizador trabajo al lado del guionista Vicente Leñero, y del gran cinefotografo Gabriel Figueroa. Esta fue la ultima pelicula del Villar.