Ni el mejor anuncio de automóviles podría superar este film ya que aquí tenemos el mejor ejemplo hecho por un diamante en bruto antes de embrutecerse.

Tenemos también pocos (pero bien empleados) elementos: camión + conductor + carretera y planos grandes (final del film) y un gran ritmo (gasolineras, incidentes escolares etc) y unas enormes influencias noir (Hitckcock, Godard etc). En definitiva, una gran película, que más que un largo parece un corto, que más suspense parece un western sobre ruedas, que más que un debut parece la gran obra maestra que todo autor consigue a lo largo de su experiencia como director.

La vi cuando era peque y sigue siendo de mis favoritas. Gracias Spielberg por darnos tu mejor película. Lástima que fuera tu primer debut y después no siguieras predicando cine comercial con elementos austeros.

Pocos films he visto en los que la angusita existencial, el miedo a morir pero al mismo tiempo estar dispuesto a suicidarse si las situaciones lo requieren, o la soledad tomaran tanto protagonismo.
La carretera o la filmación de la famosa frase "el hombre es un lobo para el hombre". Un viaje a lo desconocido, a la esperanza que nunca llega. Un guión que te transportará a un viaje de mal rollo continuo (sin pausas, sin concesiones) que pondrá a fuerza tu resistencia emocial, que te hará sufrir y en definitiva algo que hace tiempo que no ocurre: SENTIR.
Hillcoat ya despertó en mi una sana curiosidad con su "Propuesta", pero esta vez lo ha mejorado bastante pues en este film el guión está mejor estructurado. Escamotea escenas violentas en aras de una fluidez rítmica de cara al espectador y utiliza sabiamente a Javier A. para lograr una fotografía realista, impactante.

Un descenso a los infiernos en la primera parte del film, que afortunadamente se diluye a medida que avanza el film.

La única pega: el personaje de C. Theron, un tanto desdibujado e innecesario.

Brendan Fraser como siempre: MAL.
Helen Mirren: Descolocada y reiterativa en su papel de gruñona
Dirección: Contenida y cauta. Muy inglesa
Guión: por momentos engancha por otros avergüenza pero por lo menos no está supeditado a un actor, como sí lo estaba la Momia.
Paul Betany: lo mejor de la función.

Total y resumiendo, que para ser inglesa no está nada mal.Para pasar un domingo por la tarde inflándote a pipas y a olvidar.

Menos el título en español, todo me gusta.

La fotografía, la puesta en escena, los actores, las actrices .... pero sobretodo una cosa, un detalle, "ese algo" que le da un aire distinto ... yo creo que es el ritmo funk que lleva, es ese sentido de Lee del ritmo, de no aburrir, de estar sugiriendo a cada plano.

¿Y que si se nota que es de Spike Lee? Mmmm.... bueno, tiene momentos en los que sí (el detective advirtiendo a un policia que modere su vocabulario racista), las escenas de acción: técnicamente filmados muy al estilo de lo que se filmaba en los 70's, y algún plano fijo en momento de acción (cuando Denzel corre "inmóvil") que ya utilizó en su magistral "Última noche".

No entro a valorar si éste sobreactúa o no o si la música no encaja, ya que con una segunda visión todos esos problemas "técnicos" desaparecen.


Como siempre, el cutre cartel español empeora la imagen de la película.

Si. Pacino estaba en racha. En medio de los 2 Padrinos, tuvo tiempo de acelerarse como un vendaval que lleva el viento. Pacino, un torpe y novato ladrón gay, hace una de sus mejores interpretaciones en su carrera, pegando unos chillidos de la hostia. Y es que la primera hora de este clásico instantáneo de Lumet, es una gloriosa sucesión de imágenes impactantes llenas de comedia y sofisticación interpretativa.

Pero luego, lueeeegoooo la cosa se va haciendo un poco más lenta, como lo demuestra las escenas telefónicas entre los personajes y el dictado del testamento de Sonny a una empleada del banco, perdiendo así parte de la chispa que tenía al principio.

De todas formas yo me quedo con Cahrles Durning, un poli callejero, un tío sincero, legal, de los 70's. Un tio que es la contraposición a los agentes del FBI que son más de despacho, de oficina.

Para una tarde lluviosa, o sin ganas de salir por ahí a que te de el aire.