La teoría del todo narra la historia de Stephen Hawking, analizando los momentos más cruciales de su vida y viendo como su enfermedad le va afectando cada vez más. Es un filme triste, que empieza con mucho carácter pero que cada vez va a menos, quizás porque no se consigue enfocar de la forma más apropiada todo lo que ha conseguido dentro del mundo de la ciencia.

Es curioso que "La teoría del todo" empiece con tanta fuerza y vaya desvaneciendo a medida que desvanece su protagonista, un aspecto que no me parece acertado para narrar su historia. Le falta una dosis extra de energía y otra de sabiduría. Él es un sabio, es un genio, todos querríamos tener su cerebro, pero si vemos la película no nos parecerá para tanto. Quizás no se enfatiza demasiado en todo lo que él es realmente, que es mucho mejor de lo que aparenta ser en ese filme.

Le falta chispa para llevarse un Óscar, pero este año no tenemos muchas más opciones.

Un cuerpo frágil en una mente de genio, pero dónde se enfatiza más en el cuerpo que en la mente. No puedo pasar del notable ante esto.

Nos adentramos en un tenebroso caso en el que dos adolescentes desaparecen y nuestros protagonistas son los encargados de averiguar qué ha pasado con estas chicas. A medida que avanza la trama, vamos encontrando respuestas, pero no sorprende ni emociona, no me transmite demasiado (personalmente).

Avanza despacio y los actos de intriga pasan muy desapercibidos. Sinceramente, parece que están narrando una historia en la que puede pasar de todo pero que a la vez, nos resulta indiferente lo que ocurra porque no consigue atraparnos y adentrarnos en el susodicho caso.

Valoro que sea una película española, así como sus múltiples nominaciones a los Goya. Pero este año hemos tenido un nivel muy bajo y esta es de las mejores a pesar de todo. Mi nota es de un 6, de interesante, por la gran interpretación de Javier Gutiérrez.

Nos adentramos en el misterioso mundo de Birdman, un personaje que parece haber interpretado nuestro protagonista durante mucho tiempo pero del cual no vemos absolutamente nada a lo largo de la película. Es un super héroe (o algo así) y bajo ese disfraz se esconde una persona que ha conseguido mucha popularidad tras encarnar ese papel pero del cuál solo quedan los restos.

Este filme da por supuestas muchas cosas y no me gustan las suposiciones. Le falta todo para llevarse el Óscar a mejor película. No puedo entender que sea la favorita para llevarse esta estatuilla porque no tiene absolutamente nada. Es hipotética. Sin fundamento. Quizás sin sentido. Poco ordenada. Confunde. Aburre.

No me gustan las interpretaciones de sus actores. No me gustan los espacios temporales en los que se desenvuelve. No me transmite absolutamente nada y no he conseguido sentir empatía hacia nada de lo que le estaba ocurriendo a nuestro protagonista.

¿Sabéis que es lo más original de la película? Una llamada por Hangouts (o Facetime) al principio de la película. Un 6 de interesante y gracias, porque ni me ha parecido interesante...

Puede que haya visto otra película, seguramente sea eso.

Siempre Alice es una película de esas que te hacen pensar sobre cómo cambiaría tu vida si de repente te vieses enfrentada a una enfermedad en la que literalmente dejases de ser tu mismo. Los pequeños detalles que nos va dejando la trama a medida que avanza son cruciales en la vida de Alice, dónde ve imposible enfrentarse a la enfermedad por mucho que quiera.

Es dolorosa, probablemente la película más dolorosa de este último año por estar presente una de las enfermedades que más daño nos pueden hacer en lo que respecta a nosotros mismos. Nos provocará impotencia, dolor y sobre todo muchas preguntas.

Buena película para reflexionar. Gran actuación por parte de Jualinne y bravo al guión, por plasmar con tanto realismo y detalle una enfermedad tan conmovedora.

¿Qué pasaría si de repente tu vida avanzase en sentido contrario? Si te levantases un día y en vez de envejecer junto a los demás, rejuvenecieses. Suena macabro. Probablemente, nunca puedas alcanzar la felicidad plena porque todo lo que tengas te lo sacarán más rápido que a nadie. En "El curioso caso de Benjamin Button" se narra una historia similar. Una película conmovedora y dramática que hará que estés 167 minutos sin parpadear.

No podíamos esperar menos de David Fincher, el gran cerebro que está detrás de todo esto. Destacando, como de costumbre, con ese toque "macabro" que nos ofrece en películas tan "retorcidas" como "Seven", "La habitación del pánico" y demases.

Y hay que añadir, por supuesto, la gran labor que los maquilladores han conseguido hacer, porque no es "moco de pavo" transformar a una persona en por lo menos 30 años más mayor, y menor respectivamente.

¡Bravo!