Haz click aquí para copiar la URL
Críticas de Cinemagavia
Críticas 3.978
Críticas ordenadas por fecha (desc.)
6
9 de abril de 2021
9 de 18 usuarios han encontrado esta crítica útil
*No es fácil ser Jordan Peele

Solo hace falta ver el tráiler e incluso la tipología del póster de Them para ver lo mucho que se parece a la obra de Jordan Peele. Tanto visualmente como temáticamente. Them es una serie que habla del racismo sufrido por parte de la comunidad negra que emigró a las zonas con más población blanca de los Estados Unidos, en este caso al barrio de East Compton de Los Ángeles.

Them recuerda a Peele no solo por el racismo sino porque lo trata des del punto de vista del terror, algo con lo que el director sorprendió en los Oscars con su película “Déjame Salir” y que le premió con un Oscar a mejor guion.

Pero el problema de la serie viene con las comparaciones. Jordan Peele utiliza el terror como un elemento más en la historia, sobre todo para darle el giro sobrenatural. Aquí el terror sobrenatural está para representar los traumas personales de la familia protagonista y en esto Them falla estrepitosamente.

*Racismo bien, terror mal

Mi problema principal en Them no es el trato que se le hace al racismo. Creo que es un acierto presentarte una comunidad de suburbio perfecta de los años 50 como los villanos de la serie. Estoy absolutamente seguro de que este caso es solo uno de los muchos casos que se dieron en situaciones parecidas. La gente de bien cuando se ve amenazada puede ser muy mala. Eso es fantástico, es maravilloso. El problema lo tengo con el trato del terror.

Si bien es cierto que la fotografía de la serie es una maravilla creo que es cargante. Es un acierto utilizar los planos ligeramente torcidos para transmitir mal rollo constante, incluso los cambios de color hacen que algunas imágenes sean impactantes, pero es tremendamente cansino. No solo es algo que agote visualmente sino que es un recurso que pierde fuerza por abusión. En una película puedo estar constantemente nervioso pero en una serie de diez episodios al final me acabo relajando y aceptando ese mal rollo constante como algo “normal”. También es verdad que no soy ni de los años 50, ni afroamericano ni he sufrido racismo, así que puede que no empatice tanto con los protagonistas.

*Conclusión

Them podría haber sido la versión mejorada de una serie ya fallida como Territorio Lovecraft. Funciona como crítica social pero falla estrepitosamente en el enfoque del terror. Lo que hace muy bien es saber que es una serie para una plataforma y darle a cada episodio exactamente el minutaje que necesita.

Escrito por Daniel Burón
Cinemagavia
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8
9 de abril de 2021
15 de 36 usuarios han encontrado esta crítica útil
*La mentira que desató el fuego

Lo primera impresión destacable que deja Exterminad a todos los salvajes, es la visión tan manifiesta y tan rigurosa del director. Se nota mucho el trabajo de investigación y el gran conocimiento que tiene Raoul Peck sobre la materia, otorgándole cierta valía para hilar y condensar un relato tan denso y tan complejo. Exterminad a todos los salvajes es un proyecto que llevaba tiempo intentando sacar adelante Raoul Peck, no solo por el mero interés personal de Peck sino también por la estrecha relación que tenía con el escritor y amigo fallecido Sven Lindqvist.

No es algo bonito de ver lo que presenta Exterminad a todos los salvajes y lo que es más importante , es que es una historia en la que todos estamos involucrados por igual; de hecho es un viaje que trasciende a la propia mortalidad del hombre, como si de un eco eterno se tratase. Todo comienza con una mentira o más bien una excusa como lo deja ver Raoul Peck; una excusa, para justificar lo inhumano y la violencia irracional ante lo diferente y ante lo que acabamos por repudiar. Esto es algo que se ha alimentado durante siglos y de lo que aun a día de hoy no nos hemos podido desprender.

Exterminad a todos los salvajes nos habla del despotismo enfundado contra las clases más minoritarias, por parte de la clase imperante del momento. Una barbarie justificada en base a una mentira mil veces contada, que ha abrasado y mancillado nuestro pasado común.

-Civilizado, semicivilizado y salvaje

Esta serie documental es también muy atrayente por su ambivalencia en el tono con el que enfoca sus cuatro capítulos. Por un lado, Exterminad a todos los salvajes mantiene una constante seriedad y rigurosidad por el tema tan delicado que intenta abordar, pero también no tiene reparos en tirar de sátira para condensar de mejor forma el relato. La edición es muy particular, porque recaba mucha información nutriéndose de diferentes fuentes; es decir, está construida a partir de una infinidad de archivos fotográficos y cinematográficos, presentando una heterogeneidad en su conjunto bastante interesante.

No es muy fácil tampoco de clasificar a esta docuserie, porque por un lado presenta una trama que se va paseando por distintas épocas y luego tiene partes que son más propias de un tipo de documental más tradicional; teniendo en casi todo su transcurso, al propio Raoul Peck como narrador.

Volviendo un poco a lo referente al tono que presenta Exterminad a todos los salvajes, se podría decir que Raoul Peck se vale de la sátira para evidenciar el ridículo de algunos de los comportamientos y mentalidades que han predominado a lo largo de nuestra historia. Consigue imbuir a la narrativa de cierta frescura y dinamismo, evitando que resulte muy pesada o intensa para el espectador.

*De Hitler a Abascal

En la parte final de Exterminad a todos los salvajes, se intenta reflexionar sobre todo lo que nos ha precedido como civilización, para entender de mejor modo el contexto social actual. No es una serie documental que pretenda dar una lección moralista, sino más bien intenta constatar que la historia no puede ser interpretable; es decir, la sangre y violencia desmedida del pasado no se puede ocultar ni mucho menos blanquearla. Raoul Peck no solo cree que no debe de caer en el olvido nuestro pasado común, sino que también reivindica que si seguimos negándolo, acabaremos cometiendo los mismos errores una y otra vez.

En pleno siglo XXI no estamos faltos de información, ya que en un solo click podemos saber lo que está pasando en Damasco (por poner un ejemplo) en tiempo real. El problema no es ese y se deja muy claro en el documental, el problema es que seguimos cegados por los propios prejuicios que venimos arrastrando desde generaciones como seres humanos. Las problemáticas que ya había desde el descubrimiento de América siguen estando latentes hoy en día; como tan bien siguen latentes los discursos de odio y xenofobia vertidos por gente como Hitler o Mussolini en su momento.

El tiempo parece poner todo en perspectiva y es por ello que la gran mayoría de nosotros al echar la vista atrás, vemos a figuras como las de Hitler con una total repulsión. Sin embargo, Hitler consiguió ser amado por un país entero, por el mismo medio que hizo que Trump llegase al poder en Estados Unidos o que el partido de Santiago Abascal este teniendo un mayor poder parlamentario en nuestro país.

*Conclusión

Exterminad a todos los salvajes es una serie documental de HBO, que mira de frente a la cruda realidad en la que se ha vertebrado la historia de occidente en estos últimos siglos de colonialismo. Una docuserie que ha sido posible gracias a una exhaustiva investigación de la materia por parte de director y su equipo, y de la que ahora podremos disfrutar como espectadores.

Una travesía dura, incomoda y rigurosa la que nos sumerge esta serie documental, exponiéndonos sin atisbos ni contemplaciones la realidad del imperialismo occidental. Una obra audiovisual más necesaria que nunca, que presenta una mirada muy interesante como es la de Raoul Peck.

Escrito por Daniel Jiménez
Cinemagavia
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
6
8 de abril de 2021
4 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
*Nuevo cine vasco

Campanadas a muerto es un thriller vasco que se acerca a los traumas familiares de Karmen y Fermín Araia, habitantes del caserío de Garizmendi, en cuyos terrenos encuentran un esqueleto que reabre viejas heridas. Toda la familia se verá metida en acusaciones mutuas, posicionadas en distintas líneas temporales, algo que en todo momento hace mella en las relaciones. Un thriller que trata de innovar en cuanto a forma, pero que quizá sea demasiado complejo al presentar una trama con muchas líneas narrativas.

La cinta de Imanol Rayo trata diversos temas como el rencor familiar, la sociedad tradicional vasca que habita los pueblos, el fuego como purificación de los problemas o el dolor por la pérdida. Pero el tema principal es la muerte como herencia familiar, podemos sentir en todo momento una especie de espíritu mortuorio que acompaña a las distintas generaciones de una familia y se apodera de ellas. La muerte también muestra su cara más dura al emplearse como arma o como motivo de existencia.

Campanadas a muerto representa el establecimiento de un nuevo cine vasco en la industria cinematográfica española actual, que, aunque debilitada, sigue siendo fundamental a nivel europeo. La sociedad vasca hace años se dio cuenta de la importancia de la cultura y por ello decidió potenciar las producciones cinematográficas, esto, junto con el Festival de Cine de San Sebastián, han contribuido al establecimiento de unos pilares muy fuertes. Esta película se enmarca en un contexto de boyante creación vasca, con grandes producciones de una excelente calidad e innovación.
Purificación familiar

Campanadas a muerto es un film que está constituido por tres niveles narrativos que se entrecruzan entre sí, como si de los pensamientos se tratase. La trama principal se centra en 2004, en la que vemos los resultados de lo sucedido en las tramas anteriores. Ambas tramas secundarias forman parte del pasado, una se sitúa cuando Fermín y Estanis tenían 20 años y la otra, cuando Néstor y Aitor tenían 18 años. Todas las tramas están muy bien conectadas entre sí, aunque en algún momento pueden hacerse pesadas por la cantidad de enredos que hay por detrás.

Para ser un guion complejo narrativamente, las interpretaciones han sido llevadas a cabo a la perfección por actores del cine vasco, que están impecables de forma pausada y calmada, sin necesidad de realizar aspavientos tratando un tema familiar. La más destacable es la de Itziar Ituño, que es capaz de ponernos los pelos de punta con tan solo realizar una mirada, es difícil mostrar tanta complejidad psicológica con tan pocos movimientos.

Sin duda alguna, lo más destacable de Campanadas a muerto es la dirección y la dirección de fotografía. Imanol Rayo innova con la planificación, ya que son planos estáticos que pudieran parecer teatrales, pero gracias al uso de distintos elementos narrativos como pueden ser los términos o el fuera de campo. Los recursos estilísticos más llamativos son los encabalgamientos sonoros y los fundidos encadenados, que emplean la poesía para aportar riqueza e información a la trama.

*Conclusión

Campanadas a muerto es la última película de Imanol Rayo. Una cinta interesante por su forma, pero desgraciadamente liosa por su trama. Quizá no sea la historia más interesante, pero la dirección consigue llevar a buen puerto la trama. Las distintas imágenes que se muestran a lo largo de la trama son muy poderosas y suficientes para mostrar el conflicto latente en la historia. Un final muy bien cerrado que consigue que el espectador de este tipo de cine quede contento.

Campanadas a muerto es un thriller vasco que interesará a los espectadores por su innovación en el género, a pesar de su temática de enredos. Necesitamos más películas vascas que reflexionen sobre los géneros e intenten revertirlos, sin embargo, esto es algo que debería impulsarse por el actual gobierno. En un mundo en el que la muerte está presente por culpa del coronavirus, debemos tratar de apoyar a proyectos como este.

Escrito por Santiago Varela Antúnez
Cinemagavia
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8
8 de abril de 2021
10 de 19 usuarios han encontrado esta crítica útil
*La obsesión

Just Philippot estrena su ópera prima bajo el nombre de La nube, con un guion de Jérôme Genevray y Franck Victor. La historia que se presenta se sale de lo convencional, para explorar un relato de obsesión e incomodidad. De esta manera, atrapa al espectador en una vorágine de sensaciones tensas y un suspense alocado. Gracias a ello, se mezcla el factor personal que envuelve a sus principales protagonistas, con lo desconocido y extraño que va cultivándose poco a poco. La irrupción de unas situaciones extremas que, en un principio, pueden no tener conexión, logran sostenerse por ese halo de misterio humano que se aleja de la ciencia ficción. Por lo cual, en todo momento se juega con saber cuándo se producirá la explosión convulsa que, finalmente, acaba sucediendo. Así, obtiene un resultado que no deja indiferente al espectador.

No obstante, lógicamente, no es una película que desde el principio siente unas bases dentro de lo estándar. Por lo que, deja una sensación de extrañeza sobre el espectador, quién realmente solo se queda con la experiencia de haberlo pasado con gran nervio. En consecuencia, el film consigue su fin, que es contrariar al público. Sin embargo, el libreto no obtiene la misma brillantez con el desarrollo de sus personajes, de los cuales se dan algunas pinceladas personales. Es cierto que da la suficiente información para contextualizar los hechos, pero no va más allá. El problema surge con la intención de darle esos puntos más dramáticos y en torno a la familia, que no obtienen la misma solidez que otros elementos narrativos de la historia. Aun así, sabe utilizar los aspectos que más fuerza les da, para solventar y equilibrar el fruto de la conjunción narrativa de la película.

*La supervivencia

Esta propuesta cinematográfica no busca un reparto coral, sino que halla su fuerza en colocar el foco en cuatro de sus actores. Para comenzar, Suliane Brahim encabeza el elenco con una madurez interpretativa increíble. Desde las primeras escenas, le otorga verosimilitud a la locura que se avecina, siendo absolutamente certera su actuación delante de la cámara. También hay que destacar la solidez con la que plantea la fragilidad de su personaje. Al mismo tiempo, brilla en aquellas partes en las que se sumerge en una locura absoluta y deja impactado al espectador ante tal remolino de experiencias. Al plantearlo desde un prisma más cercano y sencillo, su personaje adquiere un tono realista. De esta manera, contrasta con el propio concepto del film, lo que deja una conjunción estupendamente armónica y con una fuerza increíble.

Después, Marie Narbonne se mete en la piel de Laura, la hija adolescente de la familia. La actriz lo lleva desde un campo reconocido por el gran público, como es una adolescencia complicada. No obstante, Narbonne no cae en el cliché y maneja ese costumbrismo juvenil a la perfección. Asimismo, se introduce en el tono de La nube, pero manteniéndose fiel al sello de identidad actoral que marca su trabajo en pantalla. Lo mismo sucede con Sofian Khammes, que realiza una interpretación muy natural y orgánica. Incluso, se puede decir que es ese faro luminoso, que le da la oportunidad de lucirse en un prisma distinto al de sus compañeros. Únicamente, su desarrollo, desde el guion, no le da la oportunidad de poder exprimir más su personaje. Por último, Raphael Romand ofrece, pese a su corta edad, una actuación muy bien expuesta.

*Lo extraño

El punto más fuerte de La nube es la realización técnica, que saca partido a los distintos aspectos técnicos que permiten conformar esta pesadilla costumbrista. Por un lado, muestra un ambiente rural, que asfixia a sus protagonistas en el hogar familiar. Al mismo tiempo, se escogen escenarios abiertos que clarifican el estado de cada una de las localizaciones. Esta duplicidad permite al espectador situarse y poder sentir las emociones que se extraen de cada uno de ellas. Después, el uso del color es excelente, en especial, en las secuencias donde se avecina la tormenta. Esa mezcla de oscuridad, colores ocres, y apagados, encumbran la sensación de tenebrosidad. De igual manera, cabe destacar que el trabajo de la dirección artística y fotográfica ha sido magnífico, siendo uno de los elementos artísticos más llamativos en la película. Ejemplo de ello, son esos primeros planos de los insectos.

Las imágenes hablan por sí solas, y dejan escalofríos en varios momentos por lo explícitas que pueden resultar. No es una película de terror al uso, sino que utiliza conceptos que, realmente, son totalmente reconocibles por el gran público. Por eso, la conmoción es todavía más efectiva, con una crudeza visual muy acertada. No obstante, el ritmo, en ocasiones, se dilata en el tiempo, lo que hace que no siempre haya una fluidez como debiese. Por ende, hay secuencias en las que hay una sensación de poder haberse resumido en menor tiempo. A pesar de ello, el montaje es óptimo, viéndose el gran despliegue de medios para las escenas de mayor carga visual y energética. Prueba de ello, es ese final que aúna lo fantástico y lo personal, dejando un colofón que resume absolutamente la esencia total del film.

*Conclusión

La nube es un terror diferente, que hace de la incomodidad y de lo crudo su mayor fuerza. Asimismo, lo entremezcla con una vertiente costumbrista, realista, que le da un toque todavía más verosímil. Una propuesta diferente, que impacta en el espectador y deja una sensación de escalofrío. Únicamente, su factor intimista no está totalmente desarrollado. El elenco está increíble, en especial, Suliane Brahim que explota ese carácter obsesivo y terrenal. Pero, sin duda, hay que aplaudir su realización técnica, que transporta de lleno al público a esa pesadilla tensa y llena de suspense. Las obsesiones cobran fuerza en una nube de terror rural, donde la repulsión es la clave del éxito.

Escrito por Diego Da Costa
Cinemagavia
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
3
7 de abril de 2021
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
*Remix de clásicos

El campamento de mi vida (A Week Away) parece absorber sin contemplación trazos de grandes éxitos como Grease, Dirty Dancing, High School Musical o Escuela de rock. Sí, una curiosa mezcla. Pero no es de homenaje o influencia la sensación que nos deja, más bien de pura y dura imitación casi causada por una extraña pereza que se nos contagia durante el visionado.

Desde el esquema y construcción de sus personajes protagonistas hasta la trama, pasando por la paleta de colores o sus secundarios, todo rezuma un aroma a rancio. Es inevitable sentirse casi estafado. Tomamos a un joven atractivo pero problemático, un tipo duro pero tierno en su interior, atormentado por la vida. Añadimos a una protagonista dulce, de fuertes principios morales, inteligencia y belleza de vecinita de al lado, agitamos y ¡bum!. Incapaces de saborear un cóctel que pierde su sabor al haberlo tomado decenas de veces, se nos queda aguado a la espera de ser consumido.

*Cinta variada

El campamento de mi vida (A Week Away), como todo musical, toma como protagonista la música. Sí, es lo habitual, pero el calzador con el que la introducen en el guion deja una herida que, por repetición, no cicatriza. Los diálogos que dan paso son demasiado frívolos, apenas trabajados, apenas una antesala obligatoria, como si lo de los primeros 12 segundos de un videoclip que pretende narrar una historia se tratara.

Si esto pudiera cubrirse con unos buenos temas podría pasarse por alto sin problema, pero no es el caso. Si nos preguntan unas horas después del visionado, recordaremos por encima alguna de esas canciones. En realidad, lo más probable es que sea porque nos ha recordado a otra. Por ejemplo, los habituales amigos secundarios protagonizan algo demasiado similar al Summer nights de Grease. Lo que podría haber sido una vuelta de tuerca cuanto menos curiosa, se queda en lo que parece la típica grabación casera de cinta variada repleta de versiones descafeinadas de otros éxitos.

*Entre Netflix y Disney

El campamento de mi vida (A Week Away) narra la historia de Will Hawkins, un joven demasiado atormentado para su estética general, con problemas con la ley que termina en un campamento religioso. Esto da pie a personajes pintorescos, casi caricaturizados que, amén de las livianas interpretaciones de sus actores, nos dejan más fríos que un témpano. De acuerdo, no han venido aquí a regalarnos una actuación inolvidable, pero al menos esperábamos algo más digerible.

Con aspectos casi idénticos a los de cualquier serie adolescente de Disney Channel,El campamento de mi vida (A Week Away) no parece ser algo con lo que nos tropezaríamos en Netflix. Por momentos, incluso nos preguntamos qué ha cruzado por las mentes de sus guionistas, Kali Bailey, Alan Powell y Gabe Vasquez, al parir un producto que no aporta, ni siquiera, un entretenimiento olvidable.

*Conclusión

No, no esperábamos un gran musical. Ni siquiera una buena película. Pero ni bajando nuestras expectativas quedamos conformes. El campamento de mi vida (A Week Away) da la sensación de haber sido creada sin ganas, tomando de aquí y allá residuos que sus guionistas y director conservan en algún rincón de sus mentes. Ni la elección del reparto (en su mayoría, aunque sin nada destacable), ni los números musicales ni la historia, van a dejarnos la más mínima huella. Una lástima, pues ya hace demasiado tiempo que un musical juvenil no pisa fuerte y esta podría haber sido una excelente oportunidad.

Escrito por Elia Rios
Cinemagavia
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow