Alegato contra el maldito virus del sida a través de tres historias desarrolladas en diferentes partes del mundo cuyo nexo de unión es la transmisión del virus por vía intravenosa.
Ambientada con una banda sonora de excepción, intercala grandiosos planos aéreos estilo Memorias de África con planos cercanos, mostrándonos la vastedad del mundo por donde circula el incansable asesino silencioso a la vez que personaliza y humaniza la enfermedad.
Es de destacar ese sutil toque de humor que se desliza a lo largo de la cinta, humor que hace más doliente incluso la visión del dolor. Son historias duras, muy duras, narradas en forma de cuento, salpicadas de hermosos paisajes y dotadas de un tempo largo que le va muy bien al estilo narrativo.
Se aleja de los tópicos que giran alrededor del virus y desarrolla historias originales y diferentes para golpear al espectador sensible y acariciar al insensible, tratando de acercarnos a una enfermedad que se transmite exponencialmente y que pone en peligro la supervivencia de buena parte de la humanidad a lo largo y ancho del planeta.

Lo mejor: Ese toque de humor. La originalidad de las historias
Lo peor: El tufillo catolizante de la última historia

Nueva peli de bichitos plagada de bromas tontas y juegos de palabras intraducibles al castellano, con múltiples referencias al star system americano, visualmente apta para el público infantil con concesiones humorísticas al público adulto.
Después de haber explotado el mundo hormiguil en pelis como Bichos, Hormigaz o The Ant Bully, la industria de animación ataca ahora con el mundo abejil, con una historia muy poco atractiva y menos cuidada, en una macedonia donde cabe de todo al que le sobran demasiados ingredientes y le falta un montón de magia.
A pesar de algunos golpes graciosos y una fantástica recreación de la vida en la colmena, carece de una sólida estructura de guión y acaba por parecer una sucesión de sketchs mal hilvanados.
Nuevamente el protagonista es un ser inadaptado que no acaba de estar muy convencido del papel que le ha tocado en suerte en la vida y encuentra su alter ego particular en el mundo de los humanos.
Lamentablemente, con todo ese presupuesto y gran compañía de animación no logran superar a la Abeja Maya y sus amiguitos homosexuales.

Lo mejor: la recreación de la vida en la colmena. Los detalles muy cuidados.

Lo peor: la historia no es atractiva. Buena idea y pésimo guión.

Cuando se infla tanto la promoción de una película al final acaba por decepcionarte. Si además se le da bombo y platillo a la actuación de Belén Rueda y cuando la ves en la pantalla grande esperas que aparezca de un momento a otro Antonio Resines cortando jamón, entonces es imposible meterte en la peli.
La ejecución técnica de la cinta es respetable, pero un film de suspense no debe quedarse nunca ahí, debe respetar al espectador y considerarlo un ser inteligente, y no como en "El Orfanato", donde todo ya había sido visto y cocinado en otras cocinas parecidas. Recuerda sospechosamente a "El internado (Saint Ange)" de Pascal Laugier, pero no le llega ni a la suela de los zapatos, y hay planos calcados a "Los Otros" de Amenábar, sobre todo cómo resuelve la acción en las escaleras, por poner un ejemplo.
En definitiva, otra peli que hay que ver por el sólo hecho de que tus amigos ya la han visto, pero no hay nada interesante que observar. Se salvan los paisajes asturianos.

Ventajas: Paisajes de Asturias.

Desventaja s: Ya la has visto . Te adelantas a la trama . Infantil.

Deliciosa película que aúna poesía y sensibilidad sin caer en la almibarada intención que pudiera sugerir el título o la carátula. Hermoso ejercicio de guión, entrelazado y tejido con una perfección neuroquirúrgica que nos sumerge sin ambages en los entresijos del proceso creativo por los que pasa un guionista atormentado interpretado por un Nicolas Cage, por fin, en el papel de feo, su mejor interpretación desde Leaving Las Vegas.
La peli destila inteligencia por todos lados, intuyendo el mundo real detrás de cada plano, soterrando una cómica ambigüedad de caracteres distorsionados por la mirada esquizofrénica del personaje principal.
No hay ni un sólo personaje que no deba estar donde está, ni una sola secuencia de dudosa inconsistencia, ni un pero para una de las mejores obras de todos los tiempos. Sólo hay que dejarse llevar y empaparse de creatividad insómnica.

Lo mejor: el guión y el montaje.

Lo peor: que Nicolas Cage debería dar un poquito más de asco todavía.

Plagada de célebres actores y actrices en decadencia cuya época dorada hace tiempo que pasó, "Mr. Brooks" sorprende por la maravillosa complejidad psicológica del personaje, por la sublime interpretación de Kevin Costner - la mejor desde "Los intocables" - y por la nueva y desastrosa aparición de una Demi Moore que hace tiempo que debería haberse retirado ya.
Retrata de un modo más que aceptable las complejas entrañas mentales de un asesino en serie que mata por adicción, que disfruta matando pero que luego se atormenta por su pecado. Refleja una visión romántica del asesinato, acercándonos con ternura al personaje, sumamente inteligente, frío y calculador, pero al que acabas cogiendo cariño, como suele ocurrir con este tipo de asesinos. William Hurt actúa como su conciencia, entablando preciosos diálogos interiores consigo mismo.
Y ahora viene lo peor. El personaje de una poli millonaria, ya de por sí absurdo, interpretado, si es que se puede llamar así, por la peor Demi Moore desde "Streptease".
En definitiva, psicothriller con todos los clichés del género que se salva por el buen retrato psicológico del personaje central.

Ventajas: Retrato psicológico del personaje interpretado por Costner.
Desventajas: Demi Moore y su personaje.