Si la ves con el único objetivo de permanecer en tensión, estás en el sitio adecuado. Es una película con mucho movimiento, no te aburre. Ayuda muchísimo la interpretación de los actores y el carácter de los personajes (excepto el de la hermana, que me pone enferma), pero parece que se esforzaron demasiado en destacar los momentos gore (tanto en la propia película como en la enorme campaña de marketing en la que la gente salía despavorida del cine, lo cual me pareció exagerado, y eso que mi frase favorita es 'qué asco') y después no supieron profundizar en las explicaciones. Las cosas pasan porque sí, y punto. Y en este caso, no es suficiente. Hubiera agradecido un cambio de dirección diferente.

Aún así, es bastante entretenida y hay un par de escenas que te dejan con la boca abierta. ¡A comer!

Si os gustó Into the Wild, bienvenidos a la versión más espiritual.

Cheryl está en una situación personal límite. Todo en su vida se desmorona, y decide emprender un camino. Concretamente, una ruta de más de 1500 kilómetros, con la esperanza de desconectar del resto y conectar consigo misma.

El argumento es lo que ahora es tan mainstream, la 'manía' de querer encontrarte a ti mismo. Lo cierto es que en la mayoría de las escenas, también tú pareces ir desconectando y conectando. Al principio, no ves los paisajes. Ves la historia de Cheryl, no te concentras en el camino, supongo que de la misma forma que le ocurre a ella. Poco a poco, vas disfrutando de los lugares a los que llega y olvidándote un poco de quién era ella y en quién se está convirtiendo. El cuerpo es fácil sanarlo. La mente requiere de más esfuerzo, y es lo que nos muestra esta película: el camino para salvar tu alma a veces empieza por fuera, y después vas descubriéndote por dentro. Y, por supuesto, la única forma de hacerlo es tú solo.

Sublime interpretación de Reese Witherspoon. No estaba acostumbrada a verla en ese tipo de papeles, y aunque siempre me ha gustado, aquí me sorprendió muy positivamente.

Si realmente eres millenial, ya deberías haber visto esta película. Yo tuve la suerte de verla en cine, y digo suerte porque considero que es un clásico de las americanadas de instituto que hay que ver, sí o sí.

Cady ha sido educada en su casa de África hasta que, por fin, se enfrenta a la increíble aventura de sobrevivir en el instituto, de golpe y demasiado tarde. Allí descubre que existe un mundo completo, con sus 'reinas' y sus esclavos. Cady decide destronar a las populares del instituto, unas 'betches' de las que ya no quedan. Sin embargo, no todo es tan fácil cuando saboreas la fama...

Esta película no destaca por el argumento ni por la trama, pero tenemos a una (increíble, como siempre) Rachel McAddams, en un papelón de mala malísima; una jovencísima Amanda Seyfried que nos saca más de una carcajada, y por supuesto, las inigualables reinas de la comedia: Amy Poehler y Tina Fey. Tenemos un guion para enmarcar en los grandes éxitos de 'problemas del primer mundo', tenemos a Pink en la soundtrack y tenemos baile de fin de curso, ¿qué más queremos?

Icono indiscutible para los nacidos en los 'early 90s'.

Puedo decir que es mi película favorita. Seis niños crecen en un ambiente poco habitual hoy en día: viven en el bosque, sin tecnología ni colegio al que ir. Su padre, Ben, se ocupa de su educación, pero no la que suelen enseñarnos en las aulas. Los niños saben sobre supervivencia y medicina, tienen ideas y opiniones formadas sobre política, hacen ejercicio cada día y parecen ser felices. Tras un trágico imprevisto, Ben y sus hijos deben salir al mundo exterior, ése que tan bien conocen... en la teoría.

La película nos muestra la otra opción. La opción que muchos padres desechan por creerla imposible, la de poder ofrecer a sus hijos mucho más que las cosas materiales que posean o el conocimiento limitado que obtienen. Vemos los extremos de la crianza, el valor innecesario que otorgamos a las cosas mundanas, y la importancia de la sinceridad en familia. Los padres de la actualidad no quieren que sus hijos sufran, y por eso les ocultan cosas que, en realidad, es necesario que sepan. Captain Fantastic nos muestra todo esto en un ambiente diferente.

Espectacular actuación de Viggo Mortensen y, por supuesto, de todos los niños. Muy recomendable para abrir la mente.

La trama es interesante y muy hipnótica para los que se lamentan cada día de su aburrida rutina, sus trabajos y sus facturas. ¿Qué pasaría si viviéramos sin todo aquello? ¿Con la libertad que tanto nos falta? En esta película nos muestra que es posible. Una isla sólo habitada por una comunidad que vive en plena naturaleza, cohabitando y compartiendo sus tareas para vivir sin más preocupaciones que cazar para comer.

Pero, ¿puede una sociedad (aunque sea tan pequeña) mantener todo esto durante mucho tiempo? Los problemas no tardan en llegar para Leo y su grupo. Como ya he leído por ahí, la primera parte de la película es bastante buena, y el mensaje final también lo es, pero podían haberse ahorrado perfectamente los delirios de Leo y las locuras varias, y hubiera sido mucho más interesante.