La gran sorpresa del año, viene de la mano de David Lowery y el romance de caballería de la leyenda de Sir Gwain. Una película que es una de las grandes lástimas recientes del cine que no se haya podido disfrutar en la gran pantalla. Viene de la mano de Amazon, y con aparente libertad para David Lowery para liberar una visión personal de un cuento o leyenda medieval.

Fantástica y no solo por la fantasía del relato. Una película con una puesta en escena muy shakespeariana, heredera de grandes películas como el Hamlet de Lawrence Olivier o Trono de Sangre de Akira Kurosawa. Una historia de aventuras, episódicas y por las que un más que buen Del Patel es movido por las nieblas como si de un cuento mágico se tratará.

Episodios violentos, de terror e incluso cautivadores son los que complementan una obra que satiriza sobre el honor medieval. Que pone en manifiesto que la vida de un hombre en la Edad Media estaba regida por un absurdo honor que debían lograr pagando con su vida. Perder su amor, futuro, familia y bienes para morir como una leyenda de cuento. Una historia con un arco de personaje muy caballeresco donde se contempla que hincar rodilla ante la parca es la única de las opciones que te va a dar la vida.

Si hay algo a destacar son los últimos 15-20 minutos. Probablemente sea de lo mejor que se ha visto este año en materia cinematográfica por no decir lo mejor. Cobardía, valentía, honor, deshonor y muchas leyendas.

Ya me sorprendió "Bone Tomahawk" de este maestro, y esta obra lo confirma como un destripa géneros. Zaller coge un género, trae un guión, lo dirige con un aroma justo de clasicismo mezclando con un aroma de irreverencia y revisitación de estos géneros o sub-géneros.

Ultraviolenta, frenética, desoladora e incluso épica obra donde uno de los miembros de la generación cómica "Frat Pack" se convierte en una mezcla de Vin Diesel y Steven Seagal pero haciendo un papelón descomunal.

No es una historia de redención ni de libertad, la película es el resultado del descenso de un hombre a los infiernos por una razón spoiler así que no la comentaré mucho.

Si hay algo que no es casualidad es la cruz de la nuca de Vaughn, puesto que va a ir con entereza a uno de los Via Crucis más gores de la historia del cine. Un descenso y un encierro en catacumbas con una lectura religiosa extremadamente potente.

Es muy desconocida y la tenéis en Netflix. Aviso, estómagos sensibles, esta es como su predecesora "Bone Tomahawk", así que cuidado con la sangre y entrañas

David Cronenberg, el padre de la nueva carne y uno de los nombres más desvergonzados detrás de una cámara. No duda en prender fuego a los ojos del espectador, siempre trayendo fe a los ateos y vacíos a los creyentes.

Uno nunca va a saber qué va a tener delante cuando va a ver una película de Cronenberg, sabe que es muy probable en determinados momentos le horrorice, le repulse o le de la sensación de que no conoce al hombre como creía. Esas sensaciones que te confunden, porque en mi caso, como en el de varios, a muchos nos gusta sumergirnos en estos mundos retorcidos, perversos y llenos de unos terrores que no conocíamos hasta que los hemos tenido delante.

"Inseparables" es puro Cronenberg. Terror provocado por la perversión, las drogas, las inseguridades y los lazos que nos atrapan y nos subyugan a unas sensaciones de terror corpóreo. Porque Cronenberg ataca al estado físico y mental, terror en la carne y en el alma. Destrucción en ambas, convierte la belleza y el éxito en basura pálida y raquítica. Todo llevado a través de una puesta en escena que genera ansiedad, agobio y caídas irrefrenables.

Además la película del canadiense no podría completarse sin ese totémico Jeremy Irons, una actuación camaleónica a partir de 2 personajes gemelos, iguales a la par que antagónicos. Y Cronenberg magistralmente lo lleva a un tercer personaje, un siamés abducido por los opiáceos, consciente de qué es uno sólo, abandonado a su suerte y sin ayuda posible.

El cambio que supuso en Corea "Old Boy" Y "Memories of murder" se pueden ver en esta película de Lee Jeong-beom, una película con la violencia desencadenada de la primera obra mencionada y con el ritmo narrativo de la segunda.

Una película con un triunfo en la estructura narrativa, puesto que triunfa de arrancar la historia antes de ver a los personajes. Empieza con violencia para después ir a por el protagonista y que deduzcas tú, que ese es el protagonista. Unos personajes muy bien trabajados y ningún personaje es dejado atrás, todos tienen su momento. Hasta un duelo de 2 sanguinarios se ve con un respeto y admiración excepcional gracias a este peculiar tratamiento de los personajes.

Jeong-beom le da un soplo de aire y de ternura a una obra que durante su primera media hora podría parecer un "Leon, el profesional" a lo coreano. Una película con una acción muy violenta, dinámica, y por que no decirlo, muy entretenida que va acompañada de una poesía muy particular, muy bella y muy inapropiado de esta clase de films.

Pienso que en mis cortos 21 años he visto bastante cine (no tanto cómo me hubiera gustado) y jamás había visto una historia tan original con tanta frescura y que además se desarrollara con tanto cariño, ternura, emoción e incluso tristeza.

Spike Jonze suele demostrar que su cerebro va a otras revoluciones, es distinto, y aquí lo vuelve a demostrar. Una historia en un futuro distópico, donde el amor es frío y distante, el mundo ahora es un lugar donde contratas a gente para que escriba cartas de amor de tu parte. Esta película haría un buen tándem con "Langosta" de Yorgos Lanthimos, aunque no tengan realmente mucho que ver, pero son 2 versiones futuristas del amor realmente interesantes. En este contexto, un divorciado hundido en su tristeza (tremendo Joaquín Phoenix) se instala un sistema operativo (la voz de Scarlett Johansson le da una personalidad increíble que hace que una simple voz roce la forma corpórea) para combatir su soledad, un S.O que le acabará enamorando locamente.

La película funciona como un rayo, la puesta en escena me enamora con esos decorados tan perfectos y esa fotografía que roza al ojo humano. Spike Jonze en esta película te emociona, te conmueve, te saca sonrisas y te hace pensar, que es lo más importante.

Aparte de ser una historia de amor, Her lo es también una historia de ciencia ficción donde te pregunta hasta dónde va a llegar realmente la tecnología. ¿Qué futuro nos espera si sustituimos lo más humano por la tecnología? ¿Vamos a depender nuestra felicidad de la compañía de un sistema operativo? Spike nos cuenta qué la tecnología solo son herramientas, y si nos ayudan que sean para preocuparnos por lo realmente humano. Un S.O te podrá hacer tareas de una manera increíble, pero no podrás rozar su cara, sentir sus miradas ni verlo cada día de tu vida. La película de sci-fi más humana de todas.