Una de las ganadoras a la palma de oro con más discusión es esta obra que para mí es magnífica. Si me permiten la redundancia con el título, es la historia de amor más salvaje de la historia del cine. Si bien David Lynch mostraba en obras como "Eraserhead" o "Carretera perdida" mostraba su visión de la paternidad y los errores respectivamente, en "Corazón salvaje" muestra su visión altamente surrealista pero profundamente coherente del amor.

Esta obra magna tiene el mejor comienzo de toda la filmografía del director de Montana, violento y loco como anticipo de lo que va a ser esta película. Y la historia es un no parar de surrealismo, situaciones incómodas y personajes bizarros. Y es que los puntos fuertes de Lynch están en 2 puntos. Su increíble atmósfera que ha influido en tantísimos artistas y su creación de personajes tan original como elaborada. Los personajes de Lynch son tan particulares, tan bizarros y tan únicos que no vas a encontrar en el cine ninguno que se acerque lo más mínimo a uno de ellos y está película es el claro ejemplo, donde cada personaje es factor determinante en esta historia de amor tórrido.

El reparto mola muchísimo, Nicolas Cage sobreactuadísimo, pero es que la película lo pide, es el Elvis Presley Lyncheano que nos cantará `Love Me Tender´; Laura Dern es la mejor del reparto, esta increíble y la otra chica Lynch Isabella Rosellini está tremenda. Harry Dean Stanton esta increíblemente frágil y Willem Dafoe es otro que sobreactúa hasta llegar al paroxismo de la locura, pero, ¿y qué?, si le da una personalidad psicópata brutal al personaje.

En resumidas cuentas, esta película es una de las películas románticas de mi corazón, siendo una road movie repleta de locura y diálogos ingeniosos y geniales a partes iguales. Y por no hablar del final que es precioso, de los mejores finales de Lynch. Sé que no es una obra de gusto unánime, pero a mi me vuelve loco.

Siempre defiendo el género de terror, y más cintas de esta guisa. El género de terror no solo consiste en screams, oscuridad, fantasmas o demonios. Salir de tu zona de comfort, enfrentarte a algo completamente desconocido o poner en tela de juicio tus creencias puede llegar a ser más terrorífico, y eso es lo que le hace Robin Hardy al protagonista.

La película muestra el retrato más primitivo de las creencias del hombre. En una isla aún hay gente creyendo en dioses del sol o los cultivos, y no por eso caen en lo primitivo, puesto que viven vidas felices aunque extrañas y perturbadoras al ojo del hombre criado en el cristianismo. La película explora los prejuicios y el alto precio que ellos conllevan.

La historia la vivimos desde el prisma de un cristiano de fe férrea y adentrándonos con él en una atmósfera propia de cuentos de Lovecraft y te vas encontrando a una población unida, feliz, pero que oculta. Con cuerpo de thriller pero ambiente del mejor terror de la Hammer Films (podría ser esta película una de ellas, pero no es el caso) Robin Hardy trae una historia de terror para el recuerdo y con un clímax ardiente.

Un Christopher Lee para la historia da vida al líder de esta religión en uno de sus mejores papeles. Britt Ekland parece una sirena homérica y Edward Woodward es el primer protagonista que deseas que pague por sus prejuicios. Normal que sea la cinta de terror preferida de Tim Burton.

Woody Allen es un cinéfilo de traca y aquí él decide hacer una película de cine negro con su más impronta personal y el resultado es una comedia intrigante, gamberra y original.

Allen hace referencias a lo mejor del género y te trae una trama que bebe de la que para mí es la mejor película de todo el cine negro "Perdición". Película que van a ver al principio de la "Misterioso asesinato en Manhattan" y hace que el personaje de Diane Keaton (que está magnífica, como siempre) se entrometa en una extraña situación en la que están envueltos sus vecinos.

Allen, de nuevo, trae un guión magnífico con líneas de diálogo para tirarse al suelo y no parar de reír y con una trama criminal y noir muy atractiva y perfectamente hilada. Líneas de diálogo de lo más top con referencias culturales, como la línea de diálogo de la ópera de Wagner. Traslada el noir de barrios oscuros y suburbiales con criminales y detectives privados pertenecientes a lo más bajo a la sociedad de clase media-alta de Manhattan con personajes que tienen una vidas tan monótonas que necesitan de un misterioso asesinato para entretenerse y gozar con la vida de los demás invadidos por curiosidad y cotilleos. Obra que culmina con un final con un precioso homenaje a otra obra maestra del género como es "La dama de Shangai" de Orson Welles y el juego magnífico de espejos. En resumen, obra maestra de Woody Allen.

Prometía, y mucho. Me parece un buen homenaje al Giallo, pero se me pierde en cuanto a película. La obra de Strickland va durante 1 hora de lado a lado sin tener claro a donde ir, nos desconcierta, nos intenta aterrar y, lo siento, a mi me aburre.

Me da la sensación de que Strickland quiere hacer tanto que se autozancadilla y le sale una batidora de terror con homenaje clarísimo al Giallo, siendo el director ficticio una clara analogía del director Dario Argento.

Aún así, hay escenas perturbadoras que me sacan sonrisa, Toby Jones esta increíble y el diseño de sonido ayuda mucho a un experimento que trata Peter, que consiste en que veas una película en solo sonidos, algo muy interesante.

La comentan como una obra Lyncheana (me cansa ese adjetivo, no os voy a mentir) pero no lo es, más que nada porque Lynch está a años luz de Strickland. Llaman ya Lyncheano a todo lo surrealista, bizarro y perturbador. Lynch siempre tiene las cosas claras y se nota en su dirección que va decidido y aquí a primer visionado no lo noto.

Igual tengo que darle más oportunidades, le daremos un tiempo y volveremos a ver que tal.

Me hablaron muy bien de Funny Games, fui con altas expectativas a verla aprovechando que estaba en Filmin y la verdad, es una obra maestra absoluta.

El brillante Michael Haneke te planta una historia, o más bien, un relato, acerca de la violencia y las psicopatías del ser humano. Michael tuvo que disfrutar muchísimo rodando porque te hace sufrir durante el rodaje de una manera impresionante. El trabajo del sonido y la música es pieza clave para el suspense de esta obra, Haneke te ata al sillón y te sacude y te sacude y te sacude.

Este thriller psicológico que roza el film de terror tiene un detalle brillante. Michael Haneke no solo te muestra unas acciones horribles dignas de Jack el destripador, sino que con un uso maravilloso de la cuarta pared, te hace partícipe de la barbarie puesta en escena. Haneke nos juzga tanto como ejecutores como de espectadores. Nos culpa de que lo veamos, de cómo es impresionante que queramos ver eso y te hace incluso sentir mal. Es nuestra culpa que esto pase

El guión es magníficos, diálogos ingeniosos y un desarrollo de la narrativa con una ejecución tremenda y se ayuda de pequeños detalles para sacar una tortura prácticamente nihilista, cuidado con los vecinos que vayan a pedirles huevos. El reparto esta de 10, sobre todo Arno Frisch, más seguro de si mismo que el propio director dirigiendo esta obra magna.

Lo dicho, maestría europea.