Otro de los clásicos del gran maestro del suspense, Alfred Hitchcock, aunque algo fallido para un servidor.

Frente a obras llenas de tensión y guiones genialmente trabajados en su puesta en escena, Atrapa un ladrón palidece. No tiene los tintes oscuros de La Ventana Indiscreta o el humor sutil y acción trepidante de Con la Muerte en los Talones.

Y es una lástima porque su trama y ambientación son el escenario perfecto para una historia sobre ladrones, inteligente y con estilo. No es que esté ausente de ambas cualidades, pero no habría estado de más algo de más insistencia.

El problema es que Cary Grant casi parece que se aburre en su papel y no nos brinda actuación como la de Arsénico por Compasión, por poner un ejemplo de su excelente carrera. ¿Está mal? Nada más lejos de la verdad, pero su sobriedad no casa del todo bien con el personaje. Por otro lado Grace Kelly está fantástica, llena la pantalla cada vez que suelta sus líneas de dialogo y en algunos momentos incluso llegó a engañarme.

Por otro lado la trama parece perder el ritmo en alguna ocasión, y creo que podría haberse resuelto de formas mucho más interesantes e impactantes.

En definitiva, esperaba algo más de este gran clásico que seguro que ganará más con un segundo visionado, pero que de momento no me ha llegado a atrapar del todo.