La verdad es que no es la mejor película que ha dirigido Clint Eastwood, y se nota que a sus 80 y pico años, uno ya va pensando en qué pasará después de la muerte, si es que realmente pasa algo, pero es una historia interesante, creas o no creas en lo paranormal, y Matt Damon y Cécile de France hacen unas muy buenas interpretaciones, Si eres de lágrima fácil, llorarás viéndola, si no lo eres, te dará pena, pero te deja un sabor agridulce, es decir, no es una película de salir del cine con ganas de tirarse por un puente, como algunos dramones tipo "Mi vida sin mí", sino que es dramática pero con un toque de.... ¿alegría se podría decir?..
Bueno, que para mi ha valido la pena gastarme 7 euros para verla, y sigo pensando que Clint Eastwood es muy buen director aunque no tan buen actor.
Lo mejor: Matt Damon
Lo peor: Que doblan algunas escenas en francés y ¿otras no?.. O todas o ninguna..