Krasinski realiza un triunfo de cine inspirado que combina éxito comercial asegurado con gran cine arriesgado y tintes de autor, se convierte ya en un pequeño clásico moderno de terror, ese género que está en decadencia y que además siempre se infravalora en general sea de antes o de ahora, solo hay que mirar las notas del cine de terror en FA...

Técnicamente una maravilla desde el inicio, la cámara se mueve lejos de los clichés y simpleza comercial, es un filme que destaca por su cadencia casi meditativa tan impensable hoy en día en los grandes cines... Mezcla cine mudo con un diseño de sonido magistral, tratado con delicadeza y también crudeza. Es el horror nacido de la sonoridad.

En este tipo de cine como vas a pedir un guión como el de Pulp Fiction, de verdad gente os quejáis del guión? Aquí las impresiones y el impacto viene puramente de la imagen y el sonido de manera primaria, lo que ves y lo que no, lo que oyes y lo que no oyes, el manejo de la tensión es como un juego de niños en las manos de Krasinski, lo hace parecer fácil.

Las interpretaciones son más que correctas desde una Emily Blunt aterrada y visceral hasta el propio Krasinski encarnando una sólida figura paternal.

La gente se queja por quejarse, que razones puedes tener para criticar una obra que busca nuevos horizontes en un género de manera experimental y que además lo combina con una viabilidad comercial interesante? La gente no se aclara, quiere más escenas explicitas o menos? Porque no un término medio?

En definitiva queda claro que es un indiscutible nueva obra mayor del terror y Krasinski un director que se confirma con ideas atrevidas y refrescantes en una industria que pide a gritos savia nueva, un talento a seguir.