Cuarta película que veo de Bigas Luna y cuarta película que me parece un zurullo, con perdón. Dudo que repita con una quinta, dada la experiencia. Me reafirmo en lo que ya he escrito alguna otra vez: Bigas Luna es un director mediocre, absurdamente sobrevalorado, vulgar, zafio y grosero. Una especie de Mariano Ozores pero con ínfulas de trascendente pedantería. Puestos a elegir entre los dos me quedo sin dudar con Ozores, es sincero, no engaña a nadie ni pretende ser más de lo que es. Y mucho más divertido, sin duda.

"Jamón, Jamón" es algó así como un cutre western jamonero (en vez de revólveres se matan a jamonazo limpio, literalmente) en la España profunda, con un argumento kafkiano de puro inverosímil, unos personajes irreales de comportamientos ridículos, una escena final que parece una tomadura de pelo al espectador y unas interpretaciones en las que solo se salva la jovencísima Penélope Cruz. Porque Jordi Mollá es una especie de Forrest Gump cabreado y con mirada de loco, mientras que Javier Bardem es el de sus inicios, un macarra descerebrado de discoteca barata con cara de bestia. Stefania Sandrelli, Anna Galiena y Juan Diego hacen lo que malamente pueden con sus patéticos personajes.

Y todo este grotesco mejunje lo dirige Bigas Luna a su estilo, o sea, tetas, folleteos, más tetas, más folleteos, muchas tetas, muchos folleteos. Todos con todas y todas con todos.

Pues eso: Bigas Luna. Le subo a un 3 por Penélope Cruz, lo único salvable de la película.