Haz click aquí para copiar la URL
España España · Ourense
Voto de Roberto:
8
Ciencia ficción. Thriller Un hombre descubre a través de sus prismáticos a una preciosa joven e intenta encontrarla en la profundidad del bosque. De repente, un individuo armado con unas tijeras y la cara vendada lo ataca por la espalda, a pesar de lo cual consigue huir y llega a un laboratorio científico situado en mitad del bosque. Allí, una máquina le ofrece la oportunidad de realizar un viaje extraordinario, un viaje en el que la posibilidad de encontrarse a ... [+]
20 de marzo de 2019
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Los cronocrímenes es el ejemplo perfecto de cómo hacer cine de calidad con un presupuesto muy inferior al que en principio requeriría la idea a ejecutar. Si Nacho Vigalondo rodase esta película en tiempos de Colossal tendríamos una ambientación mucho más hollywoodiense que en este caso, pero si algo le sobra al cántabro es imaginación. La solución fue ambientar la película casi como serie B, dándole una dimensión entre oscura y freak y alejándola así de otros enfoques mucho más blancos o de naturaleza científica.

Tampoco tendría sentido hacer esto en una película de un contenido visual grotesco o de ideas muy complejas. Así, lo que nos plantea es el viaje en el tiempo llevado a la mínima potencia. Es cierto que puede ser complejo para alguien que nunca ha visto este tipo de películas, pero resultará un chiste para cualquier amante de la física cuántica. Esto no es positivo ni negativo, simplemente agrada que el director sea honesto con lo que nos quiere contar y no nos venda la moto. Se agradece pues, que no haya ningún efecto de autoflagelación hollywoodiense que se salga de lo planteado. Coherencia y modestia.

Pero a pesar de la sencillez de la idea, la entrada en su juego es de lo mejor que nos puede pasar. Una vez nos vemos metidos en un universo oscuro y delirante (que no es otro que el universo oscuro y delirante de su director), encontramos un montón de posibilidades, dilemas morales, emociones y sensaciones. Muy pocos consiguen transmitir tanto con tan poco. Y es que en la película pasamos de lo añorable a lo repugnante, de la media sonrisa al miedo, del mal rollo a la sorpresa.

Es cierto que Karra Elejalde no es el actor más apropiado para este filme, que Bárbara Goenaga está bien sin más y que Nacho Vigalondo actuar, lo que se dice actuar, sabe poco tirando a nada. Es cierto también que hay escenas bastante predecibles (aunque no contarlas o darlas por hecho sería un error importante). Pero quedémonos con lo más importante. Posiblemente nadie ha conseguido tanto con tan poco, Nadie. Ni Ed Wood.
Roberto
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow