Un poco decepcionado salgo del cine, la verdad.
Después de haber jugado y gozado la trilogía de PS2 y el juegaco de XBox 360, la pretendida "espectacularidad" de la película se me antoja escasilla, por no decir plomazo.
Aún así, la cinta del irregular Newell tiene algunas bazas a su favor. Principalmente Gemma Arterton, guapísma, simpaticona y muchísimo más divertida que su parteneire, un Jake Gyllenhaal buenorro, hinchado y con cara simiesca durante las dos horas, eternas, que dura la cinta.
Los efectos especiales, flojillos, requetevistos y poco espectaculares para el pastizal que han costado.
Es verdad que a ratos tiene la virtud de dirigir la mirada del jugón a cornisas, barras y columnas y hacerle plantearse el camino a seguir, lo mejorcito de la saga.
En una época de adaptaciones de videojuegos en la que la mayoría pincha, Prince of Persia pasa la prueba pero sin demasiada nota. Prometía demasiado...
Lo mejor: La prota. Algunos momentos plataformeros totales. La banda sonora, preciosa.
Lo peor: El prota. Ben Kingsley, que nos da una de cal y otra de arena, en un papel de malo bombón a lo Jaffar totalmente desaprovechado.
Para no fans jugones. O si, nunca se sabe....