Crítica breve de Teniente Corrupto (2009)

En el film de Abel Ferrara no había nada políticamente correcto, veíamos a un teniente encarnado por el actor Harvey Keitel que paseaba por la pantalla con crudeza su depravación, lo cual hacia de Teniente Corrupto (1992) un film notable y original. Pero en este remake realizado por Werner Hergoz nos encontramos con un teniente más correcto y previsible que el realizado por Ferrara. Y sí, las comparaciones son odiosas pero son inevitables. Teniendo en cuenta que un servidor ha visto con anterioridad la versión original y después la de Hergoz.

Porque por mucho que Nicolas Cage haga un papel, que pese a no ser una de sus mejores actuaciones, le va bien - sobre todo su particular forma de esnifar muy club Disney - no supera ni llega por asomo al trabajo realizado por Keitel. Pero Cage no es el único que deja su interpretación a medias, vemos también a un desperdiciado Val Kilmer (con algo de sobrepeso) que de ser un gran actor de primera protagonizando películas como El Santo (1997) o Heat (1995), ha de hacer de un simple secundario de relleno. Eso sí, la irregularidad de esta nueva versión de Teniente Corrupto se ve compensada a una buena banda sonora realizada por Mark Isham.