Una película de bajo presupuesto atractiva y con buenas ideas, que no terminan de cuajar por culpa de un guión predecible y repetitivo, tiene mucho potencial en su comienzo pero luego se entorpece bastante, hay situaciones de tensión y momentos delirantes, pero, en general, de manera bastante irregular, una pena.
Para empezar al hijo es para matarlo, de los personajes más odiosos e imbéciles que he visto en mucho tiempo, si fuera yo el padre tendría mi propia purga con el pero fijo, luego está la hija (de toma pan y moja) que tampoco es que sea muy lista, el padre y la madre (de toma pan y moja también ja ja) se les va la situación de las manos, y bueno más o menos si reaccionan como deberían hacerlo, aunque la decisión que toman no es la que yo hubiera decidido personalmente.
Los toques gore son pocos pero muy bienvenidos, y las máscaras de los asaltantes, y la forma en que algunos se mueven (una chica muy feliz con su máscara de psicópata y un machete saltando cual Heidi, por ejemplo) está muy bien, la verdad, el toque sádico y morboso lo tiene, pero es desaprovechado por los típicos sustos de siempre, volumen alto, nada sorprendente, nada de miedo, eso si, te pone en tensión continúa, y además es muy entretenida, se pasa volando.
Lo que más me ha gustado es el toque distópico de una situación moralmente impensable, y que ellos lo ven como algo absolutamente normal.
Mi nota: 6,75.