Another Earth es la primera obra importante de (ciencia) ficción de Mike Cahill. Algo que hay que tener muy en cuenta a la hora de ver la película, ya que alguno podrá sentirse decepcionado.

Bajo mi punto de vista, éste es el mejor tipo de ciencia ficción que se puede encontrar en el cine. Uno que no se basa en grandes efectos, o cosas siendo arrojadas hacia la cámara, si no uno en el que tienen lugar personajes verosímiles conviviendo en un ambiente fantástico, como una especie de "¿Qué pasaría si...". La película no cuenta la historia del descubrimiento de un planeta muy cercano a La Tierra, y con condiciones idénticas a este, la película cuenta la historia de Rhoda y John, que se ven conectados trágicamente después de un accidente causado, secundariamente, por el ya nombrado planeta.
Para ser una primera película de ficción, creo que se hizo un trabajo más que decente. ¿Peca Mike Cahill de ser obvio en sus intenciones? Puede ser... Pero no hay nada más bueno que encontrar en el cine independiente a directores que quieran plantear dudas en la mente del espectador, asuntos filosóficos que son observados a la pasada por la mayoría solo por ser planteados por un director de cine independiente del nuevo Siglo, y no un escritor europeo de hace más de 100 años. Claro, obviamente los tiempos son otros, y uno ya está acostumbrado a ver por internet muchas cosas extrañas, y descubrimientos que tal vez ya no logran sorprender del todo porque mucho ya se ha visto. Ahora tenemos, desde un robot que se canta automáticamente el feliz cumpleaños a sí mismo en Marte cada año, hasta alguien que salta desde la estratósfera sólo para romper un récord. Repito, mucho ya se ha visto, así que muchos directores y productoras piensan que la única manera de llegarle al público con un relato de ciencia ficción, es colmar la pantalla de efectos especiales en 3D hasta el hartazgo. Así que se agradece cuando se quiere hacer algo más honesto, con personajes de verdad, y sentimientos de verdad.