Los hombres de 1920 pensaban que una mujer por mucho talento que tuviese jamas podría compaginar el trabajo de esposa y madre con una profesión sacrificada como la música. Muchas orquestas importantes se negaban a contratar a mujeres y mucho menos que una mujer dirigiera una orquesta de hombres.

Estados Unidos, 1926  Willy Wolters, holandesa de 24 años, emigró al continente americano con sus padres cuando era niña. Sueña con convertirse en directora de orquesta, pero esta es una ambición que nadie toma en serio. Mas tarde se volvería a Holanda para estudiar y regresaria a Usa como Antonia Brico.
Esta es la historia real de esta mujer que con ayuda de la primera dama Eleanor Roosevelt logro crear una banda de musica en Nueva York en 1934 solamente con mujeres, demostrando así que podían tocar instrumentos de la misma manera que los hombres. Logrando también ser la primera mujer que dirigiera la Orquesta sinfónica de Nueva York.

A la sombra del movimiento Metoo la holandesa Maria Peters escribe y dirige la película un tanto artificial con un resultado más ficticio de lo que realmente es, y todos esos problemas llevan a tapar un poco la linea argumental principal.

El nivel visual de la película convence, fotografía y vestuario están notables, pero destaca sobre todo la protagonista Christanne de Bruijn que resplandece ante la cámara. Todo esto hace que la película logre gustar a pesar de sus muchos defectos.
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