Otro fallido remake de la película de Francois Truffaut de 1966, basándose en el famoso libro de Ray Bradbury escrito en 1953 como una historia de advertencia ante la represión de la "caza de brujas" del senador McCarthy contra los comunistas de la época. 

Producida por HBO para su plataforma que a pesar de su interesante guion, no consigue un buen acabado, resultando bastante decepcionante. 

La historia es bien conocida, una sociedad distópica en la que la democracia ha sido reemplazada por un gobierno fascista en el que todos los libros, música y arte están considerados "inapropiados" y por consiguiente prohibidos. Los ciudadanos son controlados por ordenadores y la libertad es cosa del pasado. Los encargados de destruir los libros son curiosamente los bomberos.

Aquí es donde entra Michael B. Jordan interpretando a Guy Montag, un bombero que incendia libros, pero que se cuestiona su trabajo, después de conocer a Clarsisse (Sofia Boutella), comienza a comprender lo injusta de esta situación cambiándose bando y uniéndose a la resistencia.  

Al igual que ocurría en novela de Margaret Atwood de 1985 "El cuento de la criada" que se ha hecho tan famosa por la serie de TV, Canadá es la vía de escape para escapar de esta locura y encontrar la libertad nuevamente. Pero la película termina atascándose y no deja fluir bien las ideas.

El director Ramin Baharani, (del que recuerdo la interesante 99 Homes) construye una película con los gustos de ahora, actualizando las redes sociales y cosas reconocibles como"Alexa" quedando el concepto bastante torpe y poco imaginativo, como si fuera un mal episodio de "Black Mirror".
Destino Arrakis.com