Recuerdo cuando fui a ver esta película al cine y el fuerte impacto que tuvo sobre mí. Recuerdo ver ese fortísimo drama del paro; preludio de lo que hoy tantos millones de familias viven en este país; y que en ese momento era simplemente una triste situación no demasiado puntual.
Desde el 2002 han pasado muchos años, y el país ha cambiado mucho. Pero la historia de "Los lunes al sol" es mucho más reciente de lo que era antes, y eso es lo que hace grande a esta película.
Fernando León de Aranoa es un experto retratando el drama social español. Y como ya demostró con las formidables "Familia", "Barrio" o "Princesas", en esta ocasión nos da una tremenda bofetada con el drama del paro. Nos zarandea para que reaccionemos ante la situación que tenemos ante nuestros ojos, y que muchas veces nos negamos a vislumbrar, y sobre todo a tomar medidas para que cambie.
Sin lugar a dudas, uno de los puntos fuertes de esta brillante película es el trabajo de los actores. Todos sin lugar a dudas realizan un trabajo soberbio, que fue luego recompensado con diversos Goyas para 3 de ellos (además del de director y película).
En fin, nos encontramos ante una de las películas sociales más fuertes e impactantes que ha dado el cine español. Cómo una situación extrema va desgastando al ser humano. Una persona que un día lo tenía todo, y de la noche a la mañana se queda sin nada que hacer, y en una edad muy difícil para que le den otra oportunidad. Uno intenta salir, intenta buscar una opción, pero los rechazos son continuos; y cada día uno se va sintiendo más invisible y menos persona. Solo le quedan a uno los lunes tumbados al sol para coger energía y disfrutar; algo que no hacen los trabajadores ya que no pueden descansar y desconectar del triste día a día.