Nos encontramos ante una comedia que al leer su sinopsis uno se hace una idea en la cabeza que luego no se corresponde con la realidad.
Uno se imagina una gran comedia, con una historia que enganchará y que estará llena de momentos muy efectivos.
En realidad esto no es así. Uno se encuentra con una comedia bastante simple que se desinfla por minutos, llegando a un final bastante básico y hasta cierto punto infantil.
Sí debo decir que tiene algunos momento puntuales que resultan efectivos. Uno encuentra algunos salvavidas en estas escenas en las que te ríes, pero dichos momentos no hacen que la película resulte efectiva.
El film sorprendentemente cuenta con dos grandes pesos pesados de la interpretación. Por un lado el impresionante Billy Bob Thornton, el cual realiza la mejor interpretación de la película. Junto a él Susan Sarandon, la cual realiza una actuación correcta, pero alejada de lo que nos tiene acostumbrados. Y acompañándolos se encuentra Seann William Scott, un actor que no llega a convencer, ya que todo lo que hace en su filmografía resulta similar, y en mi opinión este papel de protagonista le queda un poco grande.
En fin, nos encontramos ante una comedia de la que uno se espera mucho más de lo que al final resulta ser. Es cierto que cuenta con momentos graciosos y gags efectivos, pero la verdad es que en general todo resulta un poco flojo sin llegar a producirse esa explosión cómica que uno imagina en todo momento que llegará a aparecer.