La importancia de esta peli dentro del cine español tiene su origen en el año de la propuesta y no tanto por la propuesta en sí misma. Nos encontramos ante un thriller limpio, a pesar de su sadismo manifiesto, su morbo por la violencia explícita, en donde el cine se automenciona dentro de una obra de género.

A ella le gustan las pelis violentas, decide hacer una tesis con ella. Luego llega la muerte y la aparición de una cinta que compromete a más de uno. Tesis hace del suspenso su mayor virtud y la dilatación de determinadas secuencias le otorgan a la cinta un aire particular que le juega muy a favor. No obstante, las vueltas de tuerca son esperadas y efectivamente ocurren, es decir, Amenábar parte de convencionalismos bien marcados desarrollándolos con precisión y establece una historia pseudo policial con jóvenes en el medio descubriendo secretos y ampliando el espectro de las posibilidades. En este aspecto, Tesis es idéntica a cualquier thriller: pasando la mitad de la peli la trama se complejiza abriendo y cerrando pistas y acudiendo a elementos "sorpresivos" que no resultan del todo, pero que funcionan.

Recomendable, cuidada, estéticamente cruda pero bella al mismo tiempo, Tesis sin ser LA propuesta consigue entretener sin más.