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Voto de Antonio Ruiz:
6
7,2
20.116
Drama
En plena postguerra, Pepita (María León), una joven cordobesa, abandona su aldea y viaja a Madrid para estar cerca de su hermana Hortensia (Inma Cuesta) que está embarazada y en prisión. Una vez en la capital, se enamora de Paulino (Marc Clotet), un valenciano de familia burguesa que sigue luchando en las montañas de la sierra de Madrid. (FILMAFFINITY)
31 de agosto de 2012
0 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Técnicamente la peli está bien a todos los niveles y se deja ver. Los principales defectos los veo en el argumento: es de por sí un melodrama facilón, y deja muy bien parados a los "buenos" y muy mal a otros.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Una mujer en la cárcel, separada de su marido que está emboscado en la sierra y es perseguido por los civiles; que está embarazada y, para mayor desgracia, es condenada a muerte: ¿se pueden pergeñar circunstancias más aptas para el drama? Mujer idealista privada de libertad, pena de muerte en ciernes, niño que va a quedar huérfano, padre huído de la justicia y malherido sobre el que planea un final poco halagüeño... Por lo general, centrar el foco sobre lo evidente suele dar mal resultado artístico, por obvio, y aunque pretende desviarse el protagonismo sobre la hermana de la presa, su personaje acaba estando al servicio de la trama de los antiguos republicanos y la desgracia se hace evidente desde el primer momento. Es, por tanto, un drama demasiado "dulzón", pues es un producto que no necesita digestión: viene ya digerido de fábrica.
El "Viva la República" que grita la presa en su último instante ante el pelotón de fusilamiento queda forzado y poco cohesionado con el perfil más humano que político que se ha mostrado de ella -y, en general, de todos los personajes- durante todo el film. ¿No resulta chocante y paradójico que a ella, que de seguro no habría tomado en sus manos un arma durante la contienda, le caiga la pena máxima, y que el Chaqueta Negra, por el contrario, soldado y dirigente rebelde como era, lograra librarse y alcanzar un "final feliz" con su novia al cabo de los años? Hubo muchas condenas a muerte, pero también hubo muchas conmutaciones por largas penas de cárcel; a gente con mucha más responsabilidad en la guerra que este personaje de la peli (Ortensia) le conmutaron la pena de muerte. Esta tragedia sólo podría haber sido tal sin perder la coherencia ni la credibilidad si, por ejemplo, se hubiera tomado el paradigma del memorable Miguel Hernández: el del republicano al que ofrecen la salvación si abjura de sus ideales, cosa que (con un par; y mucha obcecación) no hace, por lo que acaba encontrando la muerte.
El "Viva la República" que grita la presa en su último instante ante el pelotón de fusilamiento queda forzado y poco cohesionado con el perfil más humano que político que se ha mostrado de ella -y, en general, de todos los personajes- durante todo el film. ¿No resulta chocante y paradójico que a ella, que de seguro no habría tomado en sus manos un arma durante la contienda, le caiga la pena máxima, y que el Chaqueta Negra, por el contrario, soldado y dirigente rebelde como era, lograra librarse y alcanzar un "final feliz" con su novia al cabo de los años? Hubo muchas condenas a muerte, pero también hubo muchas conmutaciones por largas penas de cárcel; a gente con mucha más responsabilidad en la guerra que este personaje de la peli (Ortensia) le conmutaron la pena de muerte. Esta tragedia sólo podría haber sido tal sin perder la coherencia ni la credibilidad si, por ejemplo, se hubiera tomado el paradigma del memorable Miguel Hernández: el del republicano al que ofrecen la salvación si abjura de sus ideales, cosa que (con un par; y mucha obcecación) no hace, por lo que acaba encontrando la muerte.