Martín McDonagh un director que nos ha ido preparando el terreno desde sus inicios, sus dos anteriores trabajos aunque bastante inferiores a esta , ya iban anunciando que su avecinaban buenos tiempos para este director.

Desde hace ya muchos meses, los críticos y el público, vienen anunciando lo que ahora podemos decir, una auténtica obra maestra del cine. Parecía casi imposible pero al fin tenemos una firma candidata a llevarse el óscar a la mejor película y además bien merecido.

La película tiene un guión alucinante, con una mezcla de humor negro y drama que nos dejará muy tocados, ya que va entremezclando los temas con tanta armonía que en ciertos momentos, sólo podemos pestañear ante lo que estamos viendo. La trama es un tren a toda velocidad, lleno de angustias y risas, es esa mezcla de género junto con todos lo temas que trata lo que nos pone los pelos de punta.

La cinta tiene tal cantidad de reflexiones sobre tantos temas, que es difícil quedarse solamente con un momento, ya que toda ella es una gran espiral que nos embarca es una de las mejores películas de los últimos años.

Su parte técnica también nos deja helados, esos planos majestuosos que presta atención a todos lo detalles, esas melodías que tan bien acompañan.

Y por último hemos dejado el apartado de las actuaciones, donde solamente se puede alabar el trabajo de todos ellos, para empezar Frances McDormand que se marca la actuación de su vida, una interpretación maravillosa que nos pone los pelos de punta, pero junta a ella tenemos a un reparto que brilla como un sol de agosto, desde Woody hasta Dinklage, todos ellos encarnando personajes muy profundos, todos ellos con una impactante historia que contar.

Como conclusión sólo podemos decir que estamos ante una obra maestra, que no hay que perderse.

Lo mejor: Nos remueve desde inicio hasta fin
Lo peor: Que no tengamos más cintas como esta
Recomendada: SI