Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Voto de spotlessmind:
9
Drama La película consta de nueve tramas paralelas ambientadas en el Valle de San Fernando, en Los Ángeles: un niño prodigio, el presentador de un concurso de televisión, un ex-niño prodigio, un moribundo, su hijo perdido, la mujer y el enfermero del moribundo. Son historias aparentemente independientes, pero que guardan entre sí una extraña relación. (FILMAFFINITY)
10 de septiembre de 2011
9 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
“Magnolia” es una de las mejores películas que he visto en mi vida. Con un tono entre la tragedia y la comedia grotesca, construye con increíble ritmo un puzzle de situaciones y personajes que abarcan distintas experiencias y sentimientos que nos abruman en la vida urbana occidental.

Paul Thomas Anderson ha expresado varias veces su admiración por Robert Altman y por su film “Vidas cruzadas”, del que coge la idea de entretejer historias simultáneas de múltiples personajes. Pero mientras Altman parecía quedarse sólo con lo “sucio” del realismo literario de Raymond Carver sin contar con su componente humanista, Anderson tiene el mérito de alcanzar las más altas cotas de emoción y empatía hacia sus imperfectos personajes.

Claro que eso sólo sucede si entras en la película, y admito que ésta no es para todos los públicos, ni por el drama que trata ni por la forma en que lo hace. El propio Jason Robards (que interpreta al productor con cáncer terminal) reconoció que su primera reacción al leer el guión fue de rechazo total. Además, está filmado con un estilo fácilmente tachable de snob y postmoderno, que puede dar rabia a algunos espectadores. De hecho, a mí me dan rabia muchos films con ese estilo, por considerarlos totalmente fríos y huecos, pero este es el caso contrario.

Con el único vínculo (a veces forzado) de un concurso de televisión con niños, “Magnolia” cuenta las historias de varias personas marcadas a fuego por errores, frustraciones y traumas del pasado. La única excepción es el niño, que precisamente ahora está pasando por la experiencia que seguramente marcará toda su vida. Es imposible que alguien pueda quedarse indiferente ante el ir y venir de estos personajes en su desesperada búsqueda de una segunda oportunidad, de acabar con el pasado, tomar un nuevo rumbo en sus vidas, y redimirse. Porque, ¿quién no ha visto nunca frustradas sus aspiraciones? ¿Quién no ha hecho algo de lo que se arrepiente profundamente? ¿Quién no ha perdido o se ha alejado de alguien querido? ¿Quién no ha amado nunca, ni se ha sentido rechazado? ¿Quién no quiere una nueva oportunidad?

La película transmite todo estos sentimientos a través de un prisma de humor excéntrico que suaviza la tragedia. Y si son creíbles, es gracias a uno de los mejores repartos de la historia. Todos están geniales. Anderson incluso saca el máximo jugo de la incapacidad actoral de Tom Cruise.

Otra proeza del director es la de coger la canción “Wise up” de Aimee Mann, ya utilizada en la lamentable “Jerry Maguire”, y elaborar un playlist inolvidable con otras canciones de la cantante que parecen destinadas a la película.

Por supuesto, algunos elementos chirrían en un conjunto que considero magistral. Hay escenas y personajes secundarios que no acaban de encajar siempre, pero son detalles menores. La verdad es que si te metes en la película, no te das cuenta ni de cómo el montaje agilísimo y la fotografía hipnótica hacen que las tres horas de metraje pasen volando.
spotlessmind
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow