“Embarazados” es una comedia menor que funciona perfectamente gracias a sus dos protagonistas (Paco León y Alexandra Jiménez tienen una química perfecta y su actuación es sorprendentemente creíble) y también gracias a una falta de pretensiones evidente. Está claro que “Embarazados” no pretende más que entretener durante hora y media, no es un Shakespeare, no es un Lorca, no busca la tragedia por encima de la comedia. Simplemente busca entretener sin molestar demasiado. Y vaya si lo consigue. Porque, en realidad, la historia que cuenta es bien poco. En realidad la búsqueda del embarazo y sus consecuencias no es más que una excusa para contarnos una historia de amor entre dos personas, bien narrada y totalmente creíble. Si a eso le añades unos secundarios divertidos, algunas escenas de transición logradas, y un tono ligero, entonces te topas de bruces con algo divertido, honesto y entretenido. Porque “Embarazados” parece no pretender más y eso, hoy en día, es todo un logro: saber que lo que tienes entre manos da para construir una moto y no un caro automóvil. Porque una buena moto te lleva a tu destino antes que un mal coche. Bien por Juana Macias que han hecho una comedia ligera, disfrutable y magníficamente interpretada..