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Costa Rica Costa Rica · Guápiles
Voto de 10P24H:
7
Acción. Drama. Romance En la antigua China, Ouyang Feng es un decaído armador de katanas conducido por la envidia hacia su amigo y adversario. Tiene miedo al amor después de que un equivocado romance le rompiera el corazón. Feng es un solitario a perpetuidad, pero el cazador de recompensas que trabaja para él como “ciego espadachín” y otro de sus mejores guerreros descubren el infatigable secreto de amor verdadero que guarda Feng mientras resguarda su actitud ... [+]
29 de julio de 2020
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Largometraje hongkonés con una historia bastante particular detrás de cámara, el realizador tuvo diversos problemas que atrasaron la filmación y la encarecieron, para sobrellevar esto se acuerda realizar la película Se diu ying hung: Dung sing sai jau (The Eagle Shooting Heroes, 1993), que fue dirigida por Jeff Lau, prácticamente utilizando el mismo elenco con la finalidad de abaratar costos.

La obra de Lau, que además de compartir escenarios y elenco, comparte las ideas alrededor del cine de artes marciales y los enredos amorosos, solo que desde un tono cómico muy aparte de lo presentado en Dung che sai duk. Su triunfo en la taquilla contrasta con la “suerte” de Kar-Wai a pesar de su éxito en el Festival de Venecia.

Pero eso no es todo, al salir el filme hubo hasta tres montajes diferentes, lo que deja entrever problemas con la productora, que se relaciona a su vez con las dificultades a la hora de la grabación. Este es uno de los motivos por los cuales Kar-Wai presentó en el Festival de Cannes de 2008 una nueva versión Redux, con montaje e incluso escenas nuevas.

Esta es la adaptación visualizada, el guion fue escrito por el propio realizador y se centra en Ou-yang Feng (Leslie Chung), un misterioso intermediario de sicario que vive en el desierto recibirá la visita, a lo largo de poco más de un año, de distintos personajes que buscan venganza, donde se deja entrever un gran intrincado de líos amorosos.

Por estos inicios de la década de los noventa se comienza a plantear una revisión de las películas de artes marciales, donde claramente se puede ubicar este largometraje, sí a eso se le suma un realizador con una visión sumamente particular, se puede entender que esta es una obra que se aleja de cualquier concepción “normal” de una película de este género.

Junto con sus directores de fotografía predilectos, el australiano Christopher Doyle y el debutante -en ese momento- Kwan Pung-Leung, y de acuerdo con su estilo, Kar-Wai ofrece una película sumamente estilizada que se aleja del naturalismo. Se enfatiza en tonos amarillos y naranjas para incentivar aún más el espacio desértico donde se desarrolla la obra, además de la utilización de la cámara lenta, especialmente en las secuencias de peleas.

La forma como se presenta el argumento es innecesariamente complicada, especialmente en las continuas escenas sin mayor elipsis, en varios tramos cuesta seguir las ideas. Quizá por esto la constante voz en off que narra algunos de los hechos. El espectáculo visual es el que consolida el metraje, porque este mantiene el interés, además que, hasta cierto punto, el director crea en un espacio corto de tiempo, una interesante “mitología” alrededor de la región donde se desarrolla y sus personajes.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
10P24H
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