Siempre pensé que la ciencia solo necesita un misterio sin resolver para existir, pero no es solo eso Cosmos (2014) me enseño más que eso mucho más diría yo, me hizo ver que ese misterio sin resolver también te permite soñar e imaginar la majestuosidad del infinito, tanto así que después de ver el primer episodio “Contemplando la vía láctea” en verdad me hizo contemplar y fascinar lo hermoso que se ve el espacio no solo desde allá arriba sino que también desde aquí, incluso me puso a investigar por mi cuenta los misterios que no podemos resolver y las formas que tenemos para intentar resolver dicha incógnita.
Ahora la forma que te pone la historia en esa forma de animación tan atrayente, incluso a alguien como yo que prefería mil veces la historia de guerra (Roma, Alejandro Magno, cosas así) me hizo solo preferirá por poco, esos personajes que fueron perseguidos, burlados, atacados incluso quemados en una hoguera, todo por decirnos y explicar lo hermoso e infinito que puede ser el espacio, tanto que ahora me siento agradecidos con ellos por perder incluso la vida para poner su granito de arena para explicar el misterio más infinito y maravilloso que hay.
Esta serie además de poner el espacio de forma tan mágica, te presenta en una forma tan increíble las explicaciones de nuestra tierra, su edad, su creación, y todo lo maravilloso que contiene paso por paso, desde que salimos del mar hasta la conquista de la superficie.
Para ver esta serie solo necesitas dos cosas:
1- Poder contemplar e imaginar
2- Poder soñar con misterios que están a años luz
Si cumples esos requerimientos solo tienes que disfrutar la inmensidad que nos rodea no solo aquí sino que también más allá de la última frontera que hay allá arriba.