Película con corte "lentorro" japones, hecha en EEUU, con Keanu Reeves como cabeza de cartel.

Aunque digan que todos los japones se parecen, algunas caras nos pueden resultan conocidas , incluso la del joven que hace de hijo del Samurai (Jin Akanishi), que es un conocido cantante de moda.

Keanu Reeves con "barbita" y el pelo algo teñido, para un papel que le pilla algo "mayorcito", aunque realmente como siempre, esta a la altura, y resulta bastante convincente, en especial con sus peleas a espada, donde aun recuerda todo lo que le enseño Morpheo (de Matrix).

Sin hacer ningún tipo de "spoiler", es interesante destacar el principio con la persecución de la bestia a través de las llanuras. Realmente lo mejor de la película , en su nivel de espectacularidad visual.

¡Entretenida, entretenida!, no es...., pero tampoco es que sea un muermo que no se aguante. Peca de un guion, quizás elaborado y con mensaje, pero que para una película así, le falta ritmo, y que no hayan esas pausas tan prolongadas de inactividad.

Seria para ponerle un 4, pero con la calidad en ambientación y los efectos técnicos informatizados, se queda con un aprobado justillo.