Después de un demasiado "Largo domingo de noviazgo" y la agradablemente excéntrica "Mimacs", Jeneut recupera aquella sensibilidad que sedujo a tantos de nosotros en "Amelie".

Bien es cierto que aquí no encontraremos el extravagante humor itinerante que aligeraba esa sensibilidad y nos permitía olvidar su lado más cursi; y también lo es que ya no existen grandes innovaciones (no, no nos sorprenderemos boquiabiertos, ni descubriremos un nuevo mundo). Habrá decenas de cosas que nos recordarán a otros filmes y Jeneut utilizará recursos que ya hemos visto. Pero, de nuevo, lo hará con magia y acierto.

Para mí, "El extraordinario viaje de T.S. Spivet" es la más cercana de todas sus obras. Pese a la liviandad de la mayor parte de la película, creo que consigue alcanzar lugares a los que nunca antes había llegado, especialmente a través de su joven protagonista.

Me sorprenden las negativas críticas recibidas y, aunque no se trate de una genialidad, creo que Jeunet ha creado otra película imprescindible.