Película francesa dirigida por Jean-François Richet, director de "Asalto al distrito 13" o "Blood Father" con Mel Gibson, una película que narra las aventuras de François Vidocq, un hombre que ha escapado de las más grandes penitenciarias del país, una película que no tiene nada que ver con otra del mismo nombre del protagonista "Vidocq: el mito", porque esta era de terror y fantasía, muy distinto a lo que vemos aquí.
Una película entretenida sin más, con un buen empiece, que tiene como puntos positivos la brillantez visual, con una buena ambientación, así como unas buenas actuaciones y unas más que decentes escenas de acción con pequeños toques de violencia, pero el problema que tiene la película es que en el apartado del guion y de la historia me ha resultado algo sosa, sin chispa, yendo de un lado a otro pero importándote poco o nada el porqué de los sucesos, al ser una película contada con poco mimo, porque menos el protagonista actuando de Vidocq, que lo hace bastante bien, el resto está por estar y no se les da un guion adecuado para también engancharte a sus historias, con un final correcto, siendo el empiece y su final lo más destacado de una película que le ha faltado un guion que te haga disfrutar de la historia y te enganche, porque tenían todo lo demás, pero acabó siendo simplemente una película entretenida que la dejarás en el cajón de las olvidadas en poco tiempo. Nota más justa: 5,5/10.