Lo cierto es que no hay en Ted mucho mas de lo que podremos ver en el trailer, y eso junto a un tramo final que no la sienta nada bien la acaba hundiendo. Por otra parte, no digo que la cinta sea un completo fracaso, sino que simplemente no acaba siendo especialmente impactante ni tan divertida como cabria esperar.
La cosa empieza bien, y prometiendo abundantes risas, pero McFarlane se acaba perdiendo entre la comedia zafia, el humor de brocha gorda y el drama sentimental azucarado. Por todo ello Ted no es el producto transgresor y divertido que esperábamos. Y con esto no digo que no haya espectadores que se hayan reído hasta la extenuación, que los habrá, pero en mi caso ha sido una bajada continua en montaña rusa, y no precisamente por la emoción. Pobres padres por cierto, los que hayan llevado a sus retoños a ver la cinta pensando en ver a un osito hablador molón con el que entretener a sus peques. Hay momentos de humor escatológico bastante soeces (se abusa de este tipo de humor tan fácil) y nada apropiado para este sector.
El doblaje de Santi Millán es acertado y Whalberg hace lo que puede, pero al final te das cuenta de que no hay mucho mas donde rascar. La aparición de Giovanni Ribisi anecdótica totalmente: cogió el cheque y a correr que son dos días.

Ted es lo que es sin mas, no aconsejo pagar por verla porque no me encuadro en este tipo de comedia. Nunca acaba de definirse entre la comedia adulta que intenta transgredir, el drama romántico o la rompedora, y sin duda que tendrá sus defensores, pero no me encuentro entre ellos. De hecho termine cansado de la película y algo defraudado, sabiendo como sabia que no iba a ver ninguna obra maestra.
Bastante convencional y con algún momento de vergüenza ajena, Ted bien podría haberse quedado en la juguetería de la que salió, que después de todo no habría pasado nada. Decepcionante.

En la zona Spoiler comento algunos detalles.