Atli es puesto en la calle por su mujer, Agnes, al sorprenderle esta justo antes de que comenzase a masturbarse viendo, durante una noche de insomnio, de él, un antiguo vídeo en su ordenador en el que él mismo se grabó, junto a una amiga de ambos, manteniendo relaciones sexuales mientras disfrutaban de unas vacaciones. Aunque el vídeo es anterior a que Atli y Agnes comenzasen su relación ella se lo toma mal y le echa de casa con lo puesto. De esa manera Atli tiene que buscar refugio en casa de sus padres, quienes están en una situación tensa con sus vecinos con quien comparten jardín, pues el frondoso árbol de Baldvin e Inga, padres de Atli, le da demasiada sombra a la zona donde Eybjorg, pareja de Konrad, desea tomar el sol.

Con el anterior punto de partida Hafsteinn Gunnar Sigurösson, director y coautor del guion de esta película, desarrollará una especie de thriller vecinal de aire costumbrista, al principio, que se irá deslizando, pasando por el drama, algo de comedia, muy cáustica, eso sí, hasta llegar al género de terror.

Como dice el propio director, estamos ante una absoluta ficción, pero teniendo en cuenta que en Islandia disponer de un árbol, como el disponer de sol bajo el que tumbarse constituyen rarezas, si la posesión de ambas por enfrentadas partes entra en disputa no es tan exagerado pensar que las cosas pueden pasar a mayores. Paralelo a esta historia se sucederá la de Atli y Agnes, con Asa, la pequeña hija que ambos tienen en común, entre medias. Historia de una separación nada amistosa en un principio, situación que parece, por desgracia, bastante real; y que pasado un tiempo, en el que el dolor de Agnes se va atemperando, podrá irse reconduciendo, al menos hasta que se cruce con la mencionada historia paralela.

Así las cosas se puede creer que estamos ante una simple anécdota, en la que la desmesura es el patrón principal, pero no es así, el guion es más profundo y complejo de lo que la sinopsis pueda dejar entrever. Sería un disparate total si todo lo que llega a ocurrir en esta cinta fuera producto de una mera disputa entre vecinos, pero entra en juego otro factor que será determinante en el desarrollo del argumento; el de la desaparición de Uggi, el hermano mayor de Atli, a la cual su madre, Inga, no es capaz de enfrentarse, derivando en ella un serio problema mental que, es fácil suponer, determinará todo su impredecible y violento comportamiento posterior, conllevando la tragedia absoluta que creará.

Obra muy bien estructurada, de perfecto encaje de sus piezas, a cuyo buen resultado ayudan tanto el guion y la dirección como la buena interpretación de todo el elenco, que más allá de lo anecdótico hace pensar al espectador sobre la multitud de causas que pueden trastocar la mente humana y el desastre que ello puede suponer para quien lo sufra y su entorno.