Para todo aquel que conozca o sea seguidor o fan de la serie sabrá que esta especie de capítulo alargado (porque clasificarlo de otra cosa tampoco sería exactamente lo justo) encontrará todo lo que buscaba y lo que podía encontrar. En esta trilogía de 'Historias de la cripta' iniciada por la que nos ocupa, siguió después 'El club de los vampiros' y 'Revelations'. En todas ellas se hace gala de un estilo muy bizarro, muchísima violencia y sangre y siempre unos terroríficos seres dispuestos a sembrar el miedo entre los desdichados que tengan la desgracia de cruzarse en sus caminos. En 'Caballero del diablo' no se hace la excepción y el espectador encontrará lo que desea. El comienzo y los primeros 20 minutos son bastante aburridos y carentes de interés. Lo bueno empieza cuando el muy carismático ladrón de almas interpretado muy buenamente por Billy Zane hace acto de presencia, comienza la diversión para el espectador, así como un ritmo casi sin tregua en el que las salvajadas están a la orden del día y donde la pantalla de siembra de gore para una historia que no asusta, ni aterra, ni da miedo pero que sin duda alguna nos hace pasar un buen rato, bastante entretenido con un entretenimiento totalmente carente de pretensiones (y que no las necesita) y de dudosa calidad.

En lo referente a las interpretaciones, Billy Zane es lo mejor de la cinta, aportándole a su diablillo el carisma necesario como para grajearse la simpatía del espectador. William Sadler resulta correcto en su faceta de héroe y Jada Pinkett no pasa del regular. En cuanto a los efectos especiales, decir que son poco efectivos y creíbles, con un gran aire bizarro que va a la perfección con la película.

En resumen, una pasable (interesante para los que sean aficionados de la serie) cinta de terror, combinada con algo de fantasía y comedia, muy limitada de situaciones y de guión pero que sin duda alguna puede hacer pasar un buen rato entretenido y sin pretensión alguna para los espectadores que sean capaces de evadirse de todo atisbo de cine alguno.

·LO MEJOR: el carismático Billy Zane. Resulta entretenida y carece por completo de pretensiones.

·LO PEOR: los primeros 20 minutos, en los que no pasa absolutamente nada. Su condición de episodio alargado.