Sin lugar a dudas que éramos muchos los que esperábamos con ansia el retorno del eterno héroe del bosque de Sherwood, y si este retorno venía acompañado de nombres tan ilustres y con un dúo tan exitoso y a la par efectivo como es el formado por Scott/Crowe, aparentemente el resultado no parecía en nada desdeñable. Lamentablemente, la decepción no fue menor.

Comenzando por el que iba a ser uno de sus puntos fuertes, decir que Russell Crowe no llega a estar a la altura del personaje es quedarse corto, ya que ni siquiera encaja o le da el tono adecuado a Sir Robin de Longstride. Poco más puede hacer un reparto algo desajustado en el que solo parece brillar por momentos Max von Sydow en un estupendo papel, o unos perdidos y desapercibidos William Hurt o Cate Blanchett (con una Lady Marian menos glamourosa y radiante que nunca), o un Mark Strong que comienza a parecer autoparódico con el mismo villano de siempre.

No obstante, el auténtico problema de este contemporáneo y reciclado 'Robin Hood' es que carece del espíritu de la historia original, reduciéndolo a una colección de los manierismos típicos y ensalzados del cine del peor Scott en horas bajas. Se agradece que se quiera dar una visión más adulta y profundizada del personaje, pero el resultado final resulta frío, sin auténtico dramatismo y con momentos bastante forzados, la compañeros de Robin pasan completamente desapercibidos (ni siquiera el fortachón de Little John se gana su merecido protagonismo), sin el auténtico sentido del humor que siempre portaba el personaje, sin su ácida y estilizada verborrea... en resumen, sin su 'esencia', completamente falto de Vida...

Puede que Scott quisiera realizar aquí una versión similar a lo que fue 'Gladiator' en su tiempo: una revisitación histórica moderna teñida de sangre y un guión mucho más explícito, pero acabó olvidándose por el camino toda la esencia del personaje, dejando la sensación de ser una de las obras más fallidas de su director (por más que éste y su estrella vacilaran en las revistas sobre lo guay y realista que iba a ser esta nueva revisitación del clásico). Puede que esta versión sea más espectacular y adulta, pero yo personalmente prefiero seguir quedándome con las hazañas de un saltarín y dicharachero Errol Flynn en lugar de este Légolas de segunda fila.

·LO MEJOR: La estupenda realización de las batallas, marca de la casa. Max von Sydow.

·LO PEOR: La alarmante falta de vida del relato. Ni Crowe ni Scott están a la altura de la historia que pretenden contar. Aburre.