Lo mejor: Nos transporta a nuestra infancia
Lo peor: Nada

Cuando uno mira la primera película de Indiana Jones y se plantea realizar una crítica, entra en un profundo dilema. ¿Qué puedo decir de la película que no se haya dicho ya? ¿Realmente hace falta escribirla? Y no, no lo creo. Ni tampoco creo que se pueda decir nada nuevo que no se haya contado ya anteriormente. Los fans de la saga se la conocen de memoria, y resulta absurdo adentrarse en tecnicismos, en si hay un agujero de guion aquí o allí, en si el personaje de Karen Allen es decorativo y poco más… ¿Qué importa? ‘En busca del arca perdida’ es la película que lo empieza todo. Es pura diversión. Es Indiana Jones corriendo, saltando y pasándolo mal por un puñado de serpientes. No es un héroe todopoderoso y se agradece. Es cierto que realmente, si quitas a Indiana Jones de la ecuación, todo sigue igual. Las acciones de Indiana Jones no impiden nada, no tienen ningún efecto en la trama, pero da igual, aun así amamos el personaje ya que es pura carisma (gracias Harrison Ford). Así que poco se puede decir de ‘En busca del arca perdida’ más que miradla y disfrutad como niños.