"Spartan" debe ser por Esparta, el campo de entrenamiento de los superagentes que resisten toda suerte de penalidades y pruebas. Incluidas las imbecilidades de sus mandos.
Hombres duros, mujeres que también compiten con ellos en la escala de Mohs. Todo para buscar a la hija del presidente de turno, que mueve a todos los agentes secretos habidos y por haber.
Suspense policial subgénero presidente gilipollas que pasa hasta de la suerte de su hija. Laura Newton no tiene quien la quiera.
Historia poco creíble, guion embarullado y mal explicado, realización a trompicones y saltos de mata. Personajes sin hondura que van y vienen por la pantalla para una conclusión penosa.
Eso sí, ritmo endiablado que nos lleva de un lugar a otro del planeta aunque parezca que nos alejamos poco de los estudios cinematográficos.
En fin, que nos pasamos el rato "Buscando a Laura desesperadamente". Floja.