Está claro que a Brad Pitt le gustó "Verano 1993" (Carla Simón, 2017). Aunque aquí en "Minari (Historia de mi familia)" tenemos la salvedad de que, al menos, al crío protagonista no apetece degollarlo con un tronzador.
Esta película de Lee Isaac Chung es de esas que te ganan por pequeños detalles, ya que a la hora de la verdad tampoco posee un gran guion, o una realización poderosa, o un fondo de armario rompedor. Más concretamente en "Minari (Historia de mi familia)" esos pequeños detalles son abuela y nieto, Youn Yuh-jung y Alan Kim. No voy a decir que merezcan spin-off propio porque ese diploma es para el personaje de Will Patton, pero ellos hacen que la cinta resulte cualquiera de los adjetivos que uséis para definirla.
En "Minari (Historia de mi familia)" Lee Isaac Chung juega un poco a emular obras como la ya citada de Carla Simón o "Kamchatka" (Marcelo Piñeyro, 2002). Aunque este nunca termina de atreverse del todo a colocar su cámara, y por consiguiente el ojo del espectador, exclusivamente en el personaje del crío, lo que precisamente hacía diferentes a dichos trabajos. A la hora de la verdad el realizador coreano se acobarda en ese aspecto, normalizando por ello la cinta, y hay que afeárselo.
En definitiva, aun siendo una buena película, defiendo que "Minari (Historia de mi familia)" ha llegado donde ha llegado por dos factores externos: el año cinematográfico revuelto, y los todavía candentes rescoldos de "Parásitos" (Bong Joon-ho, 2019).