El vestuario y la puesta en escena son sencillamente maravillosos, dignos de un verdadero cuento (pues es lo que es), como no, del ingenioso Tim Burton. La indumentaria no podía estar mejor elegida, destacando por encima de todos tanto maquillaje como atuendo de El Sombrerero Loco. La animación es espectacular: los espacios son coloridos y extravagantes, verdaderamente originales, con el ya conocido toque personal de Burton.
Por otro lado la banda sonora de Danny Elfman es realmente estupenda (como siempre), totalmente acorde con el planteamiento de la película, lo que, inconscientemente, comienza a agradar desde el principio al espectador.
El guión, aspecto más criticado por el público, es agradable y entretenido, sin llegar a la altura del original, aunque eso no la convierte en una película mala o aburrida como muchos afirman.
Finalmente la interpretación de los actores es, en todos sus aspectos, buena. Los tres intérpretes principales interpretan realmente bien a los personajes que encarnan. En este punto quiero hacer especial mención al trabajo de Helena Bonham Carter, cuyo papel de Reina Roja es excepcional.
Como conclusión, en referencia a las malas críticas que ha recibido la película, cabe decir que, por supuesto, si nos ponemos a valorar únicamente el guión quizá no resulte ser la película que muchos esperaban, pero hay aspectos que destacan por encima de otros, aspectos que también hay que valorar aunque muchos no esten acostumbrados. Nadie mejor hubiera recreado a Alicia en el pais de las maravillas.