Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Ford Farleine:
7
Thriller Un guardia de seguridad de la morgue huye y es atropellado. En el depósito de cadáveres, la policía descubre que la puerta de una de las neveras está abierta y el cadáver de una mujer ha desaparecido. El inspector de policía encargado de la investigación cuenta con la colaboración del marido de la difunta, aunque no descarta la posibilidad de que esté relacionado con el asunto... Debut en la dirección del guionista Oriol Paulo (Los ojos de Julia). (FILMAFFINITY) [+]
15 de enero de 2014
Sé el primero en valorar esta crítica
El cine español últimamente nos está dando gratas sorpresas. Es verdad que sigue habiendo películas sobre la sempiterna Guerra Civil y películas que parecen salidas de la época del destape, pero también hay que reconocer que también se están arriesgando con géneros que hasta hace poco era terreno únicamente para films que venían allende los mares: catastrófico, policiaco o el thriller.
Y esta que nos ocupa es un thriller bastante aseadito, bastante entretenido y sorprendente. Es verdad que si te pones a pensar un poco en el guión pues al final le encuentras algunos agujeros pero lo importante es que en las casi dos horas de duración te mantiene intrigado, te llevas un par de repullitos considerables y el final te sorprende. Así que misión cumplida.
Hay que felicitar al guionista por esa sorpresa y al director por contarnos una historia absorbente en un escenario claustrofóbico (un hallazgo el situar la acción en la morgue) y valiéndose de flashbacks para que la historia vaya avanzando unida con el interrogatorio al que someten al sospechoso. Siguiendo en ocasiones a “Sospechosos habituales” se debe decir que, aunque no llega al nivel de la película de Bryan Singer, sí es verdad que ya tenemos un representante digno del thriller patrio con giros argumentales incluidos.
El reparto también se lleva buena nota porque, aunque no hay pleno, sí se salvan dos de tres: José Coronado es un actor inmenso (insospechable cuando empezó como el típico guaperas), Belén Rueda también nos engatusa como femme fatale caprichosa y mezquina y demuestra que está sabiendo envejecer; el único que no se salva es Hugo Silva que no da el tipo por muchas gafas que se ponga y barba que se deje, aparte de que debería volver a sus clases de dicción porque no se le entiende cuando habla.
Ford Farleine
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow