Carece de la frescura y originalidad de la primera, es más de lo mismo, por decirlo fácil. Pero sigue teniendo ese toque de humor característico de ella, jugando con los tópicos catalanes con bastante soltura y sobretodo, con la gracia propia que tiene el cómico Dani Rovira. El mismo estilo de chistes, pero con otra cultura y nuevos personajes, lo que hace en mi opinión, que como mínimo te sea entretenida y divertida. A Dani cada vez lo veo más suelto, lo que también puede caer en su contra, pues a veces da la impresión de que cree que diga lo que diga tendrá gracia. Y por mucho arte y gracia que tenga, tampoco es eso.

Creo que es injusta la mala puntuación que tiene, pues aunque sea algo inferior, es bastante divertida.
La próxima ¿dónde? ¿Galicia?