Acercándome al núcleo argumental de la película hay algo que es usado como una carta de presentación presagiando que de esa comunidad, en ese entonces niños con una educación reprimida cristiana protestante y ultraconservadora es como la célula madre del complejo tejido de la sociedad nazi algo así como 30 años después.
Sinceramente no me la tragué demasiado. Sí, pienso que esos niños que a tan temprana edad ya se convirtieron en pichones de sádicos pueden estar en cualquier comunidad y en cualquier época, de hecho hace 100 años muchos padres muy moralistas, castigaban a sus hijos con los mismo métodos. Sin ir más lejos en Buenos Aires hace unos 75 años y lo relato en estilo indirecto se comenta que un hogar para niños expósitos llamado Preventorio Roca, y como táctica para controlar el posible mal comportamientos de chicos de 5 años, le zambullían la cabeza en agua; a los varones que no se comportaban adecuadamente los ponían en fila con un moño en la cabeza para que las niñas se rían de ellos, etc. Todo esto bajo el padrinazgo de las instituciones religiosas y no se convirtiron en nazis, sino en depresivos crónicos o personas con disfunciones sexuales. Si bien para construir un estado de terror se necesita gente de estas características, me parece que el contexto histórico propició todo lo acontecido posteriormente. Sí, pienso que Alemania vive su culpa de una forma muy intensa todavía. No discuto que Haneke sea un gran director, pero se me ocurre que quiso contribuir con su país para expiar un poco más la culpa que sienten. Por lejos me gustó mucho más Caché (escondido) y muestra el tema de la xenofobia de una forma muy interesante.