Comienza con el casamiento del sheriff Will Kane (Gary Cooper) con Amy Fuller (Grace Kelly) para comenzar una nueva vida ya casado y retirado en otro pueblo y abrir una tienda con su esposa, cuáquera de religión.
Al mismo tiempo, entran al pueblo 3 individuos, que esperan en el tren de las 12 a Frank Miller que viene lisa llanamente para vengarse de Kane, que 5 años antes lo mandó a prisión. Kane sale del pueblo con su flamante esposa pero dubitativamente, de hecho a los pocos kilómetros decide volver ya que el nuevo sheriff llegaría en 24 horas y sentía que si se iba dejaba las cosas a medio hacer por ese infrecuente pero “noble” sentido del deber que algunas personas tienen.
Ahí viene una cuenta regresiva de 85 minutos donde vemos cómo los habitantes del pueblo que habían gozado de una vida “decente” gracias al desempeño de Kane, le van dando la espalda cuando intenta reclutar gente para su cita obligada de las 12 del mediodía.
La forma como actúa cada uno de los integrantes del pueblo es lo que hace esta película atemporal en mi opinión.
Algunos tuvieron temor de unírsele, otros tenían recelos con Kane que representaba la ley, lo que para algunos representaba menores ganancias ( ej el bar, el hotel del pueblo), de hecho cuando legan los 3 primeros delincuentes al pueblo, el dueño del bar abre inmediatamente el salón augurando que ese sería “un gran día".
Cuando los ve el barbero que tenía una funeraria también, le encarga a su empleado que vaya construyendo 2 ataúdes más.
Cada uno de los habitantes de este pueblo gozaron de la seguridad que Kane les proporcionó durante su gestión, pero en esta situación límite, cada uno pensó en su propia conveniencia.
Kane ya sin esperanza de tener ayudantes, pero firme en su decisión, espera la llegada del tren de las 12.
Su esposa Amy decide tomar el tren del mediodía, el mismo donde llegaría Miller , ya que decide irse. Su religión está en contra de las armas de fuego. Mientras tanto un reloj de péndulo nos recuerda que la cuenta regresiva llega a su final a las 12 del mediodía al son de la melodía “ Do not Forsake me” ( no me abandones) que le da un carisma especial a este sheriff más sabio que violento, de hecho las tomas en que Gary Cooper camina sólo por el pueblo reflejan la tensión que está atravesando, pero no corre, no presiona a nadie, a la respuesta de no, sigue su camino sereno y tranquilo. Su esposa al oir el primer disparo se baja del tren. Kane actuó como un héroe porque no concebía otra forma de haber hecho las cosas. Finalizado su trabajo los habitantes del pueblo salen de sus casas, Kane tira su estrella de sheriff ya que había terminado su trabajo, que en este caso no era ni más ni menos que una estrella de lata y se va a concluir lo que dejó pendiente después de su boda con Amy.