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Voto de Cinemagavia:
19.828
Comedia. Terror
Viago, Deacon y Vladislav son tres vampiros que comparten piso en Nueva Zelanda. Hacen lo posible por adaptarse a la sociedad moderna: pagan el alquiler, se reparten las tareas domésticas e intentan que les inviten a entrar en los clubs. Una vida normal, salvo por una pequeña diferencia: son inmortales y tienen que alimentarse de sangre humana. Cuando su compañero del sótano, Petyr, convierte en vampiro a Nick, nuestros protagonistas ... [+]
28 de mayo de 2020
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
*Reinvención de la figura del vampiro
Esta criatura tiene diversos acercamientos, desde la saga Crepúsculo al mítico Drácula y sus numerosas versiones, pasando también por la sueca Déjame entrar. Pero nadie había pensado en dejar el terror o el romance por el humor de este filme, y no cualquier tipo, es bizarra en este sentido.
Se muestra algo muy distinto, cuatro vampiros viven en una casa de Wellington (Nueva Zelanda), haciendo una vida normal dada su condición. Una cámara acompaña a los extraños inquilinos por su rutina habitual; cómo consiguen víctimas, qué hacen para pasar el rato, la relación entre ellos y su diferencia de edad.
*Risas aseguradas
Es una cinta que no puedes tomar demasiado en serio, al final no deja de ser una parodia del género; ahí radica su gracia, en dejarse llevar por lo absurdo. Pero si entras en su propuesta y humor negro te encantará, además de que te reirás mucho con ella, que es el gran propósito de cualquier comedia.
El guion de Clement y Waititi plantea numerosas tesituras a las que se enfrentan históricamente los vampiros, pero la manera en la que se nos presenta es disparatada e hilarante. Entre otras cosas, ahonda en la enemistad de los vampiros y hombres lobo, pero sus peleas resultan ridículas, infantiles y realmente divertidas.
*Estilo novedoso y particular
El método de falso documental, demasiado explotado en el cine y las series, en esta película le va como anillo al dedo. Lo que hacemos en las sombras consigue gran complicidad hacia los protagonistas al romper la cuarta pared y poder conocer qué opinan ellos sobre su vida y situación. Evidentemente, no te crees lo que ocurre, pero te da una sensación de falsa realidad que te mete de lleno en la propuesta.
Además, ellos pueden contar historias sobre su vida pasada y su procedencia de una forma distendida que encarnan a la perfección Clement, Waititi y compañía. Las actuaciones dan la sensación de cercanía y están especialmente divertidos.
La enorme personalidad del film y su humor tan particular le ha valido una serie (que ya va por su segunda temporada) para FX, en la que la idea y universo creado se expande. En España la podemos encontrar en HBO y la película está en Filmin.
*Conclusión
Lo que hacemos en las sombras es una comedia ingeniosa y distinta, desmitifica la figura terrorífica del vampiro con el propósito de hacernos reír y lo consigue. Tiene un estilo muy particular, se agradece ver propuestas que arriesgan de esta manera.
Escrito por José Luis Arribas Gala
Esta criatura tiene diversos acercamientos, desde la saga Crepúsculo al mítico Drácula y sus numerosas versiones, pasando también por la sueca Déjame entrar. Pero nadie había pensado en dejar el terror o el romance por el humor de este filme, y no cualquier tipo, es bizarra en este sentido.
Se muestra algo muy distinto, cuatro vampiros viven en una casa de Wellington (Nueva Zelanda), haciendo una vida normal dada su condición. Una cámara acompaña a los extraños inquilinos por su rutina habitual; cómo consiguen víctimas, qué hacen para pasar el rato, la relación entre ellos y su diferencia de edad.
*Risas aseguradas
Es una cinta que no puedes tomar demasiado en serio, al final no deja de ser una parodia del género; ahí radica su gracia, en dejarse llevar por lo absurdo. Pero si entras en su propuesta y humor negro te encantará, además de que te reirás mucho con ella, que es el gran propósito de cualquier comedia.
El guion de Clement y Waititi plantea numerosas tesituras a las que se enfrentan históricamente los vampiros, pero la manera en la que se nos presenta es disparatada e hilarante. Entre otras cosas, ahonda en la enemistad de los vampiros y hombres lobo, pero sus peleas resultan ridículas, infantiles y realmente divertidas.
*Estilo novedoso y particular
El método de falso documental, demasiado explotado en el cine y las series, en esta película le va como anillo al dedo. Lo que hacemos en las sombras consigue gran complicidad hacia los protagonistas al romper la cuarta pared y poder conocer qué opinan ellos sobre su vida y situación. Evidentemente, no te crees lo que ocurre, pero te da una sensación de falsa realidad que te mete de lleno en la propuesta.
Además, ellos pueden contar historias sobre su vida pasada y su procedencia de una forma distendida que encarnan a la perfección Clement, Waititi y compañía. Las actuaciones dan la sensación de cercanía y están especialmente divertidos.
La enorme personalidad del film y su humor tan particular le ha valido una serie (que ya va por su segunda temporada) para FX, en la que la idea y universo creado se expande. En España la podemos encontrar en HBO y la película está en Filmin.
*Conclusión
Lo que hacemos en las sombras es una comedia ingeniosa y distinta, desmitifica la figura terrorífica del vampiro con el propósito de hacernos reír y lo consigue. Tiene un estilo muy particular, se agradece ver propuestas que arriesgan de esta manera.
Escrito por José Luis Arribas Gala
