Esta película me ha sorprendido muy gratamente. Es una historia de PERSONAS, así, en mayúsculas, en su esencia. Es una metáfora sobre la vida (el camino), sobre como ya no nos relacionamos entre nosotros, como entre redes sociales y dispositivos móviles mas conectados que nunca y más solos aún... Esta historia habla de como cada uno lleva "su cruz", lo que cuesta compartir y abrirse a los demás, por vergüenza, por orgullo... Me ha parecido muy buena en su historia, sus diálogos, sus personajes, su moraleja filosófico-espiritual... En definitiva, un gustazo para la inteligencia emocional...