Como “Dungeons & Dragons” fue un juego muy popular y hasta su serie animada fue también popular en su momento, era evidente que en algún momento iban a sacar una película para explotar la fama de la franquicia. Esta película fue lo que dio comienzo a la franquicia de películas y aunque no es una película asombrosa, en realidad no es tan mala como la pintan. Es una historia de aventuras muy al estilo de aquellas películas medievales de los años 80 y 90. Realmente es una película entretenida con cosas fascinantes. Jeremy Irons si sobreactúa en mayor parte de la película y es todo un villano de caricatura. Marlon Wayans es un divertido alivio cómico durante el tiempo que pasa en la película. Bruce Payne también es un buen villano y su personaje es difícil de olvidar. Muchos de los efectos especiales están buenos realmente, en especial los efectos prácticos, pero la gran falla yace mayormente en el CGI, ya que hay fondos digitales que son obvios y las criaturas hechas en CGI tienen un diseño bastante evidente. Al final, Dungeons & Dragons no es exactamente una mala película, aunque tampoco es una película excelente, pero es una película de fantasía lo suficientemente entretenida para pasar el rato. Mi calificación final para esta película es un 8/10.