Un año antes de estrenar The Warriors el gurú del entretenimiento Walter Hill presentaba esta sombría, fría y extrañamente europea peli sobre un conductor (Ryan O'neal) contratado para huídas tras golpes criminales. Con actitud de lobo solitario, serio y espartano a lo Delon en Samurai, su templanza al volante le convierte en un prestigio de la urbe más nocturna. A su caza un espléndido Bruce Dern como un obcecado poli que consigue resultar antipático y desagradable hasta la extenuación. No podía hacer Dern un "bueno" al uso, vaya clase tenía para encarnar al mal. Obviamente es el referente aplastante de Drive (Windin Refn, 2011) aunque sin ser tan sofisticada e inquietante. Pero sobretodo cuenta con una Isabelle Adjani tan deslumbrante en su traje chaqueta negro que no hay cazadora de escorpión que le haga sombra.